La pulseada por las tarifas llegó al Ministerio de Trabajo. Luz y Fuerza, el sindicato que representa a los trabajadores de las eléctricas de todo el país salvo la Ciudad de Buenos Aires y la Patagonia, pide 29,5 % de recomposición en tres o cuatro cuotas, pero las empresas del sector se rehúsan a negociar paritarias hasta no tener en claro cuánto va a ser el aumento tarifario. Es que, a casi dos años del congelamiento de las tarifas, el gobierno no define un esquema tarifario nuevo.

Este miércoles, sin ir más lejos, en una entrevista al portal especializado Enernews, el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, las tarifas de Edesur y Edenor puede ser del 9% o del 7% o "directamente no aumentar. En la Secretaría de Energía, confirmaron a este medio que no hay fecha tentativa para resolver de cuánto será la actualización tarifaria, pero el cronograma tiene por límite el 1° de mayo para concretarlo.

Martín Guzmán ya había definido que el aumento de este año sería de un dígito, pero la inercia inflacionaria mantuvo los precios no regulados por encima del 4% todo el primer trimestre, por lo que se impone la necesidad de mostrar una baja en el Índice de Precios al Consumidor.

Economistas consultados por este medio consideraron que en abril se verá una baja de la inflación por la menor concentración de aumentos de regulados. El más relevante de este mes a nivel nacional es el de las prepagas. Y a nivel de la Ciudad, se suma el de los taxis. Por eso, no creen que el Gobierno defina este mes el aumento de tarifas y espere a tener una baja que mostrar antes de convalidar nuevas subas.

Por lo pronto, las señales para las eléctricas no son alentadoras. Este jueves en el Boletín Oficial bonaerense se publicó la exención del pago de tarifas para las asociaciones civiles.

De momento, las tres cámaras que representan a las distribuidoras, las transportistas y las generadoras, se presentaron ante el Ministerio de Trabajo este jueves, pero aseguraron que no van a negociar hasta tanto no tengan claro el horizonte de ingresos con el que cuentan. O si, como sucedió durante el último gobierno de Cristina Kirchner, los aumentos de costos laborales serán cubiertos por subsidios específicos ya que no había recomposición tarifaria, o a cuenta del saldo con Cammesa.