Las posibilidades de una segunda ola de coronavirus en el AMBA tras la caída de casos en la zona más densamente poblada del país mantiene en alerta a las autoridades. El ministro de Salud porteño Fernán Quirós advirtió que es "probable o muy probable que ocurra" si no se acuerdan pautas de cuidado en la población.

Tras una primera ola que sorprendió a Europa en enero, los casos en el Viejo Continente bajaron abruptamente en verano. Sin embargo el regreso de las vacaciones trajo aumentos exponenciales de casos en todos los países y en en casi todos los contagios superaron las marcas de marzo y abril.

Una de las explicaciones es la mejora en la capacidad de testeo en y seguimiento en Europa, pero eso no quita que la curva aumente día a día. La Ciudad y la Provincia fueron al comienzo de la pandemia los epicentros de casos en la Argentina, pero desde hace más de un mes tienen una curva estable con tendencia a la baja.

Sigman: "La vacuna se empezó a producir en Argentina el miércoles de la semana pasada"

De hecho otros distritos del interior como Córdoba o Santa Fe los superaron en los partes médicos de contagios que todos los días emite el ministerio de Salud.

Pero la proximidad de las fiestas y las reuniones sociales que suelen producirse para navidad y año nuevo hacen temer un nuevo brote de contagios. En Estados Unidos, es cierto que con otras temperaturas, los especialistas están aterrados por los efectos que puedan tener las fiestas en la propagación del virus luego de que para el Día de Acción de Gracias se registraran movilizaciones masivas de población entre distintos estados y ciudades.

Es claro que el clima tiene una gran influencia en el número de contagios, pero la presencia de personas en lugares cerrados aumenta las chances de infecciones. Por eso desde la Ciudad comenzaron a pedir que los encuentros sean en lugares abiertos.

Quirós aclaró que la segunda ola "inevitable no es" y que eso depende de la "investigación, rastreo y testeo" que haga el Gobierno porteño y del "esfuerzo de los ciudadanos". Así, dijo, "la segunda ola será muy pequeña o muy poco relevante".

Sobre la situación de Covid-19 en la Ciudad, Quirós afirmó que la positividad promedio de la semana fue del 12,6 por ciento al 22 de noviembre y que, "cada día, el valor va descendiendo y eso no solo porque la curva de casos va descendiendo sino porque semana a semana vamos intensificando el sistema de investigación, rastreo y testeo".

En la Ciudad dijeron a LPO que intentarán retrasar lo máximo posible la eventual llegada de una segunda ola y lograr "que sea lo menos grave" posible. En Parque Patricios esperan poder vacunar a un millón de personas en 8 semanas. El cálculo abarca a la población de riesgo y esenciales para dos dosis de vacunas.

"Vos no podés frenar la pandemia, la cuarentena precoz no elimnó el virus, sino que ganó tiempo para equiparse. Por eso seguimos insistiendo con el pedido de concientización para las fiestas", explicaron.