El Procurador Eduardo Casal sumó otro capítulo a su resistencia contra el intento del kirchnerismo por desplazarlo: se negó a tomarle juramento como miembro del Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público Fiscal a Cesar Grau, elegido como representante del Senado la semana pasada. 

Con su incorporación, el Gobierno queda a un voto de conformar una mayoría para suspender a Casal y a dos de desplazarlo de la presidencia interina del Ministerio Público que ejerce desde 2017. Lo acusan de usurpar el cargo y de una serie de cargos por el manejo de presupuesto y la protección a fiscales como Carlos Stornelli. 

Para evitar ese escenario, Casal no dejó asumir a Grau por considerar que antes debía revisar la validez de su elección por el Senado, aun cuando fue votado por mayoría en el recinto. Reemplazó a Mario Laporta, nombrado hace un año por resolución de la entonces vicepresidenta Gabriela Michetti, un trámite que el oficialismo consideró irregular porque no fue sometido a votación. 

El kirchnerismo quedó a un voto de suspender a Casal de la Procuración 

Por argumentos similares, en la última sesión el oficialismo también desplazó a Juan Emilio Simoni como vocal suplente del Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público de la Defensa y lo reemplazó por Mariela García Lastra, quien llevaría adelante un proceso contra del defensor Gustavo Kollmann, quien asesoró al ex chofer Oscar Centeno, delator en la causa de los cuadernos. 

Stella Maris Martínez, la titular del Ministerio de la Defensa, le tomó juramento a García Lastra, pero Casal no tuvo la misma actitud y el el senador Martín Doñate, del Frente de Todos, anunció en la sesión de este jueves que lo denunciará penalmente.

"Se arroga una revisión tardía e incompetente de las decisiones de este Congreso. Palabras más palabras menos, nos dice que hará jurar al representante que elegimos de este Senado cuando se le ocurra. Es una especie de Senado precautelado", se molestó, tras leer la carta enviada por el procurador unos minutos antes. 

"Estamos ante una conducta de desprecio y de rebeldía y no encuentro paralelismo en la historia. Lo que hizo es alzarse contra la autoridad del Senado de la Nación. Es una omisión deliberada, dolosa y artera. Es el fiscal a cargo interinamente de la Procuración de la Nación. No es su potestad someter a test de validación a este Senado. Ni de formular objeción y censura". 

"A este fiscal nadie lo eligió,  jamas pasó por un concurso, llegó por una resolución de 1992 e hizo elástica su permanencia en el cargo, porque no le corresponde según la ley del Ministerio Público. Estuvo protegiendo a Stornelli durante 300 días mientras se negaba a declarar y le inició un expediente a la fiscal Gabriela Boquín", recordada por declarar abusivo el acuerdo entre el Gobierno y el Correo Argentino, la empresa a cargo de la familia de Mauricio Macri. 

"Se nos ríe en la cara en el Senado y nos dice que va a hacer lo que se le cante con medidas dilatorias, obstructivas y distractivas, que merecen ser analizadas penalmente", anunció Doñate.