A pocas horas de que se vuelva a vencer el plazo para que los bonistas acepten la propuesta de Axel Kicillof de posponer el pago del bono BP21 a mayo, en La Plata el silencio es total.

El viernes a las 13 se termina el plazo para que los acreedores contesten si aceptan aplazar el pago de US$ 250 millones de capital. El equipo económico del Gobernador debe convencer a un mínimo del 75% de los acreedores del bono BP21. Una vez que se cumpla el plazo, la provincia dará a conocer si logró llegar al piso mínimo de acreedores o no lo hizo.

Si no llega a ese porcentaje, quedarán cinco días más para que Kicillof haga un último intento, mediante un incentivo o una quita, para convencer a los acreedores. De lo contrario tendrá que buscar un mecanismo para poder desembolsar los US$ 250 millones antes del 5 de febrero. De lo contrario, la provincia entrará en default.

En las últimas horas trascendió que un grupo de fondos de inversión y tenedores de bonos de la deuda de la provincia acercaron una contraoferta para que el Gobernador cancele parte esos millones. Eso sería tomado como un gesto de buena voluntad para discutir luego un refinanciamiento del resto del capital adeudado.

Las diferencias entre Guzmán y Kicillof complican la renegociación de la deuda

Los ánimos no son los mejores en las últimas horas. El peligroso deadline que propuso Kicillof expuso tensiones entre la Rosada y La Plata. En el gobierno nacional observan con preocupación un eventual default en la provincia que representa el 40% del PBI y entienden que el Gobernador buscó marcarles la cancha al jugar con los 10 días del período de gracia.

La afirmación -atribuida al ministro de Economía de Nación, Martín Guzmán- que sostiene que, en la primera convocatoria, apenas el 26% de los acreedores habían aceptado la propuesta del gobierno impactó en La Plata.

La frase no solo contradecía a su par provincial Pablo López quien viene asegurando que el gobierno mantiene el apoyo de "un número significativo de bonistas", sino que el 26% deja al equipo económico de Kicillof muy lejos de la meta -necesaria- del 75%.

Lo curioso fue que Guzmán nunca desmintió esa afirmación que fue tapa del diario La Nación. Algunas fuentes que caminan los pasillos de calle 6 analizan que bastaba con un tuit para aclarar la situación. En tanto, en La Plata, se limitaban a decir que la negociación con los acreedores era "un proceso muy dinámico".

En un gesto a los bonistas, Kicillof propone adelantar el pago de intereses

El miércoles, a través de Twitter, Kicillof salió al cruce de un artículo de Ámbito Financiero sobre el tema y dijo estar "azorado" por el tratamiento que le da un sector del periodismo a la negociación con los bonistas.

Además, descalificó las publicaciones que afirman que el bono BP21 fue emitido por Daniel Scioli en 2011. Si bien no desmintió esa información, el Gobernador aseguró que "no hace falta ser un especialista para comprender que ese no es el problema. Los bonaerenses merecen un tratamiento más profesional de una cuestión tan seria y delicada", dijo.

A comienzos de esta semana, Kicillof jugó una carta fuerte y les propuso a los acreedores cancelar de manera anticipada los intereses que generarán los más de tres meses de diferimiento del pago. Ese fue el primer incentivo que hizo el Gobernador en el marco de la negociación.

Desde el gobierno afirman que con esta propuesta los bonistas recibirán con anterioridad el pago del interés que en la propuesta inicial -y en condiciones normales- recibirían una vez cancelado el capital. En términos llanos: el gobierno pagaría esos intereses la semana próxima, en lugar de pagarlos en mayo.

En rigor, el plazo de mañana es el segundo que otorga Kicillof para que los bonistas para que evalúen su propuesta. El primero venció el 22 de este mes sin que el gobierno pudiera convencer al 75% de los bonistas.

En primer traspié en la negociación incluyó además un duro comunicado de un sector de los bonistas en el que planteaban críticas al procedimiento del gobierno y consideraban que la provincia no les había dado ni un plan claro, ni tiempo para analizar la propuesta. Ante ese escenario, Kicillof decidió extender el plazo hasta el viernes (31 de marzo).

El viernes a las 14 está previsto que el ministro de Producción, Augusto Costa, presente a todo su gabinete en La Plata y voceros del Gobernador no descartan que Kicillof esté presente en el acto. Esta claro que si la respuesta de los acreedores es positiva, ese acto será una fiesta.