Gustavo Posse aprovechó su sexta asunción como intendente de San Isidro para enviar un mensaje a la conducción de Cambiemos: se mostró junto a Emilio Monzó y dejaron trascender que construirán una línea interna alternativa, que desafía el liderazgo de María Eugenia Vidal.

Monzó diseña su armado bonaerense y comenzará con más fuerza a caminar la provincia en marzo. Un grupo que le responde -entre ellos el possista Walter Carusso- rompieron con el PRO y armaron un bloque aparte en la legislatura bonaerense. "Seguimos en Cambiemos", aclaran a LPO, pero ya no acatarán órdenes de Vidal ni Mauricio Macri.

Monzó vuelve a las recorridas en Provincia: "Se cayó la cortina de hierro"

Ese bloque lo conforman además de Carusso, Fernando Pérez -también cercano a Posse-, Guillermo Bardón y Martín Domínguez Yelpo. Todos se mostraron junto a Monzó el último martes en la oficina del intendente de San Isidro, un rato antes del acto de asunción.

"Emilio lo felicitó por su nuevo mandato y hablaron sobre su intención de construir juntos para adelante. Serán oposición, pero con un criterio compartido de apertura y diálogo. El lugar que siempre reclamaron y no tuvieron en los últimos años", dijo a este medio una fuente presente en la reunión.  

Más tarde, Monzó y Bardón se fueron a Trenque Lauquen la asunción de otro intendente amigo, Miguel Fernández. El resto se quedó para acompañar a Posse en el acto que encabezó en la calle con casi 40 grados de sensación térmica. Algunos se mostraron en la foto, otros se refugiaron en el despacho del intendente bajo el aire acondicionado, donde se pudo ver también al "Coti" Nosiglia.

Posse y Monzó con los diputados del bloque

La calle estaba repleta y cerca de Monzó creen que sumar a Posse, un intendente que revalidó por amplia diferencia su mandato, puede sumar en el armado en el que trabaja con la mirada puesta en las legislativas de 2021 y sobre todo en el lejano 2023. Como reveló LPO, en ese contexto también buscan tender puentes con Joaquín De la Torre, que aunque todavía no se despegó del vidalismo no oculta sus críticas por la última campaña. 

Posse y De la Torre serían dos figuras importantes para la nueva etapa en la que piensa Monzó. Mientras tanto, en su mesa chica buscan sumar fotos para refutar al vidalismo, donde los chicanean con que no tienen intendentes ni concejales en el Conurbano.

Monzó y Cornejo no rompen, pero arman líneas internas para complicar a Macri

"Este trabajo es adentro de Cambiemos. No queremos romper, queremos quedarnos con la conducción", expresaron a este medio. El día del lanzamiento en Florencio Varela, dejaron claro que se rompió la cortina de hierro que Vidal le había impuesto a Monzó en el Conurbano.

Cerca de Posse explican que la idea de la reunión fue empezar a elaborar la estrategia de trabajo. "Se reafirmó la pertenencia al bloque. Se quedan, pero con un armado propio en ese espacio y con mayor autonomía de decisiones", sintetizan. A medida que avancen los días se verá en qué consiste ese despegue.