El desembarco de Mercedes Marcó del Pont a la AFIP, anticipado por este medio, depende de un controvertido personaje que lideró la ofensiva del macrismo contra Cristóbal López y Fabián de Sousa.

Se trata de Juan Capello, un abogado de confianza de la economista kirchnerista que la acompañó como asesor en sus tiempos al frente del Banco Nación y del Banco Central entre 2008 y 2013. Durante la gestión de Del Pont en el Central, Capello fue designado subgerente de Cumplimiento y Control de la entidad. Muy cercano a Amado Boudou en aquellos años, fue clave para que se apruebe el controvertido convenio para que Ciccone Calcográfica imprima billetes para el Estado. 

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Capello trabaja hace casi 15 años como abogado del ente recaudador y actualmente se desempeña como Jefe del departamento de la dirección de Legales, posición desde la cual está preparando el armado del futuro equipo de Mercedes Marcó del Pont, quien carece de experiencia en el sector tributario.

Es verdad que mantengo una amistad -en mi consideración- con Mercedes Marcó del Pont, con quien efectivamente trabajé desde 2008 a 2013.

En un mail enviado a LPO, Capello reconoce su cercanía con la ex presidenta del Banco Central. "Es verdad que mantengo una amistad -en mi consideración- con Mercedes Marcó del Pont, con quien efectivamente trabajé desde 2008 a 2013", afirmó en el texto enviado a este medio.

El abogado posee una vasta red de contactos que le permitieron mantener un lugar jerárquico en el organismo a pesar del cambio de gobierno del 2015. Tiene una gran cercanía con una de las piezas clave de la AFIP en la época de Ricardo Echegaray como fue el director Hugo Alejandro Asplindh, pero en la AFIP señalan que en los hechos responde a Jimena de la Torre y Eliseo Devoto, subdirectora general de Coordinación Técnico Institucional y subdirector general de Asuntos Jurídicos.

Desde este lugar, Capello habría sido una parte clave en la coordinación de la denuncia de la AFIP contra el Grupo Oil Combustibles, por la cual procesaron y detuvieron a sus directivos por la supuesta evasión de $8.000 millones en impuestos a los combustibles líquidos, informaron a LPO fuentes vinculadas a la AFIP. 

En la carta enviada a LPO, Capello intentó despegarse de la denuncia, que se ha convertido en un activo tóxico ante el regreso del kirchnerismo al poder. "No tuve ningún papel en cualquier actuación relativa al tema Oil, ni con relación a la empresa ni a sus accionistas", afirmó el funcionario de la AFIP, que pese al cambio de Gobierno logró que durante la gestión macrista Devoto lo ascienda a jefe de departamento en la Dirección de Asuntos Legales de la AFIP. 

La vinculación de Capello con la embestida contra Cristóbal López contrasta radicalmente con la postura de Alberto Fernández que durante toda la campaña cuestionó la detención de los empresarios y celebró su liberación.

Pero lo más llamativo es que De la Torre -a quien en el organismo mencionan como una de las jefas en los hechos de Capello-  está acusada de formar parte de una red de espionaje ilegal sobre jueces federales de Comodoro Py y ministros de la Corte Suprema. Según pudo saber LPO, De la Torre sería el brazo en la AFIP del triángulo que armó el gobierno junto con la Unidad de Información Financiera (UIF) y a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).

A pesar de ello, Capello se prepara para la llegada de Marcó del Pont el 10 de diciembre, a quien también acompañaría Carlos Sánchez (hombre de Capitanich), José Bianchi (ex jefe de recaudación de Echegaray), Walter D'Angela (actualmente segundo de Gastón Fossati en el ARBA), Guillermo Sorrentino (Director de Asuntos Legales Administrativos), Fabiana Comes (Asesora Mayor de la AFIP) y Lina Anllo (ex jefa de recursos de seguridad social con Echegaray).