Pedro Sánchez subió la apuesta este domingo con un virtual emplazamiento a podemos y al resto del sistema político. El líder socialista mandó a su vocera a aclarar que no se presentará como candidato a la Presidencia del Gobierno a menos que cuente con "los apoyos necesarios" para ello.

Esto hoy es en la hipótesis más probable, con los votos a favor de Unidas Podemos, que por ahora dice que sólo dará su 'Sí' a cambio de entrar en el ejecutivo, un extremo que el PSOE rechaza. El 23 de septiembre vence el plazo para alcanzar un acuerdo después de la primera investidura fallida del pasado julio. En caso de que no haya Gobierno por entonces, se convocarán elecciones para el 10 de noviembre. La amenaza de Sánchez es clara.

Las posturas entre PSOE y Podemos parecen irreconciliables. Sánchez se niega a la coalición tras el portazo de Iglesias en la primera sesión de investidura, cuando rechazó una vicepresidencia y tres ministerios al considerarlos "vacíos" de contenido. En sus últimas intervenciones, el socialista insistió en la "desconfianza" que generó la primera negociación y ahora emplaza a Podemos a negociar un acuerdo programático y contentarse con mirar el Gobierno de afuera.

Pedro Sánchez rechaza una nueva oferta de Podemos para formar gobierno

En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vocera Isabel Celaá dijo que "el presidente se presentaría a una nueva investidura si cuenta con los votos que le respalden". Un condicional que aumenta aún más la presión sobre Pablo Iglesias. y que incluso repercutió en el Partido Popular. Su líder Pablo Casado dijo este domingo que "el PP desbloqueará la situación si Sánchez nos quiere llevar a elecciones".

Una frase muy significativa que deja entre abierta la puerta a una abstención de su fuerza y abona las versiones que en su entorno no están para nada convencidos que les conviene una repetición electoral. Es que si Casado repite el decepcionante resultado de las pasadas elecciones, su sueño presidencial quedaría muy dañado.

Pablo Casado dijo que "el PP desbloqueará la situación si Sánchez nos quiere llevar a elecciones". Una frase muy significativa que deja entre abierta la puerta a una abstención de su fuerza y abona las versiones que en su entorno no están para nada convencidos que les conviene una repetición electoral.

Pedro Sánchez lleva todo agosto reuniéndose con colectivos sociales para elaborar un programa de 300 medidas que presentará el próximo martes y en el que incluirá medidas de Podemos para dejarlos expuestos. Sin embargo, desde Moncloa insisten en que Sánchez "no es candidato" hasta que el Rey no lo designe como tal. Será en la ronda de contactos de Felipe VI con los líderes políticos cuando Sánchez aceptará o no el encargo real de conformar Gobierno. Según Celaá, sólo dará el 'sí' cuando tenga todos los votos atados. Hasta la semana del 9 de septiembre no se prevén nuevas reuniones entre el presidente en funciones y el líder de Podemos.

"Hay trenes que pasan", dijo Celaá en referencia a la fórmula de Gobierno ofrecida hace un mes por el PSOE. "La coalición es una oferta que ya no está vigente, es una propuesta minada por la desconfianza de lo que fue la negociación y votación de la investidura dele 25 de julio".