Alberto Fernández continúa con su estrategia de sumar el respaldo de los gobernadores y este viernes tendrá su foto con los líderes del Frente Renovador de Misiones, que decidió competir con boleta corta en las elecciones y juega a varias puntas con los candidatos presidenciales.

En Posadas, el candidato kirchnerista primero tendrá su foto con los candidatos a diputados nacionales del Frente de Todos y luego mantendrá una reunión con el gobernador Hugo Passalacqua, el electo Oscar Herrera Ahuad y el jefe del espacio Carlos Rovira. Aunque en principio el encuentro sería protocolar, podría tener otro tono más amigable.

Como contó LPO, Fernández había tanteado un acuerdo con la fuerza que lidera el ex gobernador Rovira, pero éste finalmente decidió apostar al "provincialismo" y no cerró con ninguna fuerza nacional, en lo que fue leído como un gesto a Mauricio Macri con el que también tiene una relación aceitada.

El kirchnerismo y los renovadores misioneros tuvieron un acuerdo electoral en 2015 y este año el FPV local decidió no participar de las elecciones provinciales, donde el actual vice Herrera Ahuad se impuso con el 73 por ciento de los votos y le sacó más de 50 puntos a Cambiemos. Pero no hubo réplica nacional.

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En el rovirismo dicen que recibirán a todos los candidatos presidenciales que viajen a Misiones y mantendrán su estrategia provincial, es decir no apoyarán a ninguno. El juego a varias puntas (que empezó con la decisión de ir con boleta corta para satisfacción de la Rosada) incluyó la semana pasada elogios y una foto de Passalacqua y Juan Manuel Urtubey.

"Nos han votado el 99% de los que expresan favoritismo por la dupla de los Fernández, la mitad de los que prefieren a Macri y casi la totalidad de los que se expresan a favor de Lavagna", justificó Rovira. Como explicó LPO, en el espacio conviven distintas posiciones pero todas las decisiones quedan en manos del presidente de la Legislatura local.

La foto con los renovadores es parte de la estrategia de Alberto de conseguir el mayor respaldo posible de los gobernadores peronistas y afines, un terreno que Cristina Kirchner parece haberle cedido a pesar de que este miércoles ambos compartieron una foto con los pampeanos Carlos Verna y Sergio Ziliotto

La reunión en el Instituto Patria marcó la reconciliación de Cristina y Verna tras años de distanciamiento. Esa pelea tuvo su pico máximo en 2011 cuando la ex presidenta le intervino la lista y el veterano dirigente terminó bajando su candidatura. El pampeano comenzó en 2017 un acercamiento con el kirchnerismo que terminó este año con un acuerdo electoral fuerte y la elección de Ziliotto como su sucesor.

Antes de la reunión con Verna y Ziliotto, Alberto participó del congreso nacional de La Bancaria y aprovechó para mostrarse con el tucumano Juan Manzur (que el martes recibió al candidato en su provincia) y el chubutense Mariano Arcioni, otro de los que va con boleta corta. Arcioni intentó que la justicia lo habilite a ir colgado de los Fernández, pero la justicia se lo impidió.

"Vinimos a manifestarles nuestro apoyo a Alberto y a Cristina, porque la unidad es el camino", ratificó Arcioni, que de esta manera repite la estrategia del santiagueño Gerardo Zamora, aunque éste armó en su provincia la lista propia y la del Frente de Todos. En Chubut, Cristina impuso al camporista Igón para enfrentar a la lista del gobernador.