La Rosada aún no encontró el compañero de fórmula para Mauricio Macri y mientras busca convencer al radical Ernesto Sanz, baraja otras posibilidades como la de un outsider o una mujer como las radicales Karina Banfi o Laura Montero.

En un sector de la UCR aseguran que Sanz es en un 70% el elegido para llevar a la fórmula con Macri. Pero otros encumbrados sectores, que participan de la comisión de acción política que diseñó el partido para negociar la vice y las listas, advirtieron a LPO que no está definido aún que el mendocino sea el designado.

En la Rosada quieren convencer a Sanz pero dudan de que tenga la voluntad de ser candidato, incluso rechazó la oferta la semana pasada. Contrario a la costumbre de su partido, el ex senador no aceptó ningún cargo en los tres años y medio de gobierno de Cambiemos.

Si bien no descartan a Sanz, en el Gobierno siguen insistiendo con la posibilidad de ungir a un radical en la fórmula. Ya descartaron a Mario Negri y a José Cano, porque creen que están demasiado cerca de la Rosada como para demostrar una "apertura" con la fórmula. En ese contexto, creen que Martin Lousteau es el único candidato de la UCR que aporta votos, pero tampoco lo ven convencido de secundar a Macri.

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Por eso, se empezó a bajarar la posibilidad de llevar a una mujer, como pide el consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba. Se menciona a la diputada Karina Banfi, muy cercana a Google y a la actual vicegobernadora de Mendoza, Laura Montero, del sector del radicalismo mendocino que lidera Julio Cobos.

En ese marco, en la Casa Rosada también comenzaron a analizar la opción de un "tapado" que no pertenezca a ningún partido. Ya se menciona en ese sentido al neurocientífico Facundo Manes, que nunca fue candidato a nada pese a coquetear con diversos sectores.

De extracción radical, en 2017 Manes estuvo cerca de ser candidato de Cambiemos en la provincia pero pegó el portazo con una dura carta contra Marcos Peña. Este año, tras idas y venidas con Roberto Lavagna, ni siquiera descartó dialogar con Alberto Fernández. En el Gobierno creen sin embargo que Manes todavía no se quemó y que podría acercar votos de la clase media. Niegan de todos modos que haya habido conversaciones.

Télam

Por otro lado, en la Rosada prácticamente descartaron la opción que siempre prefirió Jaime Durán Barba, que es la de llevar a una candidata mujer y del PRO. En ese contexto, ya descartan a Carolina Stanley y a Patricia Bullrich, que era considerada por el "voto Bolsonaro". En la Rosada creen que ese voto ya lo tiene le propio Macri y que la ministra de Seguridad no le suma nuevos votos.

Sí se piensa, sin embargo, en los "impuros". Ellos son Emilio Monzó y Rogelio Frigerio, cuyas acciones están en alza cuando se piensa en el complejo panorama político que deberá enfrentar Macri en un eventual segundo mandato. La variante peronista de Juan Manuel Urtubey aún no fue descartada, aunque en el Gobierno creen que terminará siendo o bien candidato a presidente por afuera o a senador en un armado afín a Cambiemos.

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En medio de la indefinición, trascendió también que la Rosada tentaría a la peronista Natalia de la Sota, pero en el entorno de la legisladora electa en Córdoba dijeron a LPO que eso es "una locura" y que no existió "ningún tipo de contacto ni negociación".