La línea de pobreza dio un salto del 5,5% en marzo y llegó a los $28.330,36 para una familia formada por un matrimonio y dos hijos en edad escolar dueños de su propiedad, es decir que no deben pagar alquiler. De esta manera, la canasta básica total (CBT) anotó un alza del 56,7% respecto de igual mes del año pasado, de acuerdo a los datos de la Dirección General de Estadística y Censos (DGEC) porteña.

En tanto la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marca los ingresos necesarios mínimos para cruzar la línea de indigencia, subió 5,2% en marzo y llegó a $14.019,86 para la misma familia tipo, es decir 59,1% más que un año atrás.

La DGEC también mide las canastas para otros cuatro tipos de hogares. Por ejemplo, para un persona que vive sola y es dueña de su casa, la línea de indigencia se ubicó en $4.596,68 (5,46% más que en febrero y 59,12% más que una año atrás), mientras que la canasta de pobreza llegó a los $10.457,26.

En tanto, para un matrimonio de jubilados, la CBA llegó a $7.078,88 y la CBT alcanzó $14.239,52, un 58,44% más que en marzo de 2018.

Además de estas dos canastas, la DGEC mide los ingresos necesarios que una familia no pobre esté dentro de la zona de vulnerabilidad de caer en la pobreza. Hasta los $35.512,18 de ingreso familiar, este hogar de cuatro personas es vulnerable y a partir de allí y hasta los $44.390,23 se considera de "clase media frágil".

Así el grupo familiar que supere estos $44.390 es "clase media" y si supera los $142.048,76 se considera parte de los "sectores acomodados".