La imperiosa necesidad del equipo comunicacional del Gobierno por mostrar logros de gestión en plena campaña llevó a Mauricio Macri a mostrar una interminable fila de camiones en las principales terminales portuarias del país.

"5.000 camiones. Récord de exportación de cosechas. Kilómetros de camiones esperando entrar a los puertos del Gran Rosario", dice un posteo del Presidente en Facebook e Instagram. "Alrededor de u$s 24 mil millones de ventas al exterior", agrega.

La imagen que utilizó Macri, en rigor, se repite todos los años en esta misma época independientemente de si se registra una cosecha récord como lo será la de la actual campaña 2018/19 que se ubicará entre 130 y 140 millones de toneladas.

De hecho, según datos oficiales, en marzo de este año ingresaron a los puertos cerealeros unos 103.422 camiones versus 111.131 en el mismo mes de 2018 en medio de la peor sequía en 70 años. Se trata de una cifra 7% menor respecto al año pasado.

A los puertos del Gran Rosario, en tanto, ingresaron en marzo de este año 77.095 vehículos contra 86.206 en igual mes de 2018. "La foto (de la fila de camiones) no es sintomática de una gran reactivación", opinó el periodista Matías Longoni.

Los especialistas explicaron a LPO que para ordenar el caos logístico que se vive en los puertos durante las cosechas se creó un sistema de cupos de descarga de granos. "La red de circunvalación de Rosario está vetusta hace añares", dijo Longoni.

El economista José Luis Espert aprovechó la imagen de la fila de camiones para criticar a Macri: "Qué tendrá que ver con esto su Gobierno? Nada. No se cuelgue de lo que ocurre a pesar de usted, no por su Gobierno", escribió en Twitter.

Los equipos de comunicación del Gobierno no tuvieron en cuenta que la imagen que utilizaron para festejar la cosecha récord revela que el severo atraso logístico de la Argentina en puertos, caminos y trenes, así como la falta de rutas fluviales para enviar la cosecha desde el norte hasta la zona centro.

Los encargados de la comunicación del Gobierno no tuvieron en cuenta que la imagen que utilizaron revela que la Argentina no está en condiciones logísticas en materia de puertos y caminos para afrontar el crecimiento de la cosecha agrícola.

La foto también evidencia el atraso que tiene el país en materia de transporte de granos ante el deterioro de los ferrocarriles y la falta de rutas fluviales para enviar la cosecha en barcos desde el norte hasta la región central.

Así lo reflejan los datos oficiales: en marzo del año pasado -con una cosecha 40 millones de toneladas menor respecto a la actual- ingresaron unos 9.132 vagones cargados con granos a los puertos versus 6.413 en igual mes de este año.

Toda esta situación ayuda a explicar la pérdida de competitividad que se registra en el campo. El último índice sobre el tema que elaboró Coninagro mostró un retroceso del 3,4% en el cuarto trimestre de 2018 frente a igual periodo de 2017.

Es decir, a pesar de la fuerte devaluación que hubo el año pasado, la principal actividad económica de la Argentina perdió competitividad. "El desplome del poder adquisitivo (de los productores) se aceleró con la acentuación de la inflación", apuntó la entidad.

Cada camión de carga transporta alrededor de 30 toneladas. Ósea, para transportar la actual cosecha se realizarán más de un millón de viajes en muchos casos por rutas de doble mano que presentan un gran deterioro justamente por la gran cantidad de tránsito.

Además, si se registran lluvias copiosas en abril y mayo muchos de los camiones de cargas se ven impedidos de ingresar a los campos a retirar la producción por el estado de los caminos rurales ocasionando un freno en la liquidación de dólares.

Como sea, lo que sí podrá mostrar el Gobierno es que la cosecha récord de este año contribuirá con una mejora de alrededor de 1,2% en el PBI y aportaría, sólo en liquidación de divisas, unos u$s 10 mil millones hasta septiembre próximo.