El pedido de desafuero y detención a Cristina Kirchner llegó este jueves por tarde al Senado, pero los jefes de bloques demoraban la conformación de la Comisión de Asuntos Constitucionales para tratarlo, en una movida que contaría con el visto bueno de la Casa Rosada que no parece del todo cómoda con el escándalo político que generó la medida dispuesta por el juez Claudio Bonadío.

Hay un plazo de 60 días para tratarlo y como el 10 de diciembre cambia la composición del Congreso, será necesario armar la Comisión para empezar. Fuentes del bloque Cambiemos aseguraban que harían ese trámite en breve, pero sin embargo desde la presidencia provisional de la cámara alta que conduce Federico Pinedo, no se recibieron indicaciones para activarla.

Por la mañana, el jefe del bloque peronista Miguel Pichetto reiteró que su bloque no avalará el desafuero e insistirán con la "Doctrina Menem", que implica avanzar con el desafuero de uno de sus miembros sólo cuando tenga condena firme ratificada por un fallo de la Corte Suprema.

"Al pedido de desafuero vamos a dar una respuesta institucional no partidista", aclararon desde el bloque de Cambiemos que conduce Naidenoff, pero el presidente provisional, Federico Pinedo, todavía no conformó la comisión que debe iniciar el proceso.

Los 25 senadores que confirmó ayer en rionegrino bajo su mando son justo el número necesario para impedir los dos tercios, indispensables para avanzar con un desafuero. O sea, a Cristina le sobrarían sus 8 legisladores para salvarse de la prisión preventiva que dispuso Bonadío.

"Tenemos que continuar objetivamente el trámite constitucional y el que se prevé en la Ley de Fueros. Y garantizar el derecho a defensa de la legisladora", aclaró por su parte el formoseño Luis Naidenoff, flamante jefe del interbloque Cambiemos.

Luego firmó junto al misionero Humberto Schiavoni un comunicado del interbloque en el que aclararon que "bajo ningún aspecto seremos un obstáculo para la justicia". 

"Nuestro interbloque obrará conforme a derecho, respetando la división de poderes y adoptando las decisiones políticas que correspondan de acuerdo a los elementos que surjan de la causa, sin estar atado a precedentes. Al pedido de desafuero vamos a dar una respuesta institucional, no partidista", aclararon.

Los senadores macristas no ocultaron su desconcierto por la bomba política que detonó Bonadío y temían que se complicara la agenda de proyectos de fin de año, que incluye sancionar presupuesto y reformas tributarias y de mercado de capitales.

Para tratarlas Ángel Rozas y Miguel Pichetto sí solicitaron conformar las comisione de Presupuesto (la presidirá Esteban Bullrich) y Economía. También la de Acuerdos, que la continuará presidiendo Rodolfo Urtubey.