El Gobierno nacional difundió esta mañana que emitiría un bono en dólares a un plazo de 100 años, el plazo más largo de la historia, según anunció escuetamente el Ministerio de Finanzas. De acuerdo a la información de fuentes del mercado LPO, la tasa de interés inicial era de 8,25%. Horas más tarde, fuentes cercanas a la negociación confirmaron que habían logrado comprimir la tasa a 7,125% anual y que el monto fue de 2.750 millones de dólares.

"Argentina anuncia una emisión de bonos en dólares a 100 años de plazo", informó, sin dar más detalles, la cartera que conduce Luis Caputo a través de Twitter. Se estima que por la tarde, cuando cierren los mercados, el Ministerio informe el monto que se colocará y la tasa de interés.

Según supo LPO, la operación sería en el marco de una práctica que en el mercado se conoce como "reverse inquiry" (proceso de oferta revertida), que es cuando inversores proponen la emisión de la deuda. Así lo manifestó Caputo esta mañana en una conferencia telefónica con banqueros de Nueva York.

El rumor en el mercado es que el inversor interesado sería el fondo Marathon, que en el pasado estuvo detrás de la emisión más importante que hizo Axel Kicillof en su gestión.

Marathon, según se presenta en el su web, es un fondo de inversión especializado en inversiones de riesgo y circunstanciales basadas en el análisis fundamental de fondo.

Especialistas explicaron a LPO que difícilmente el gobierno argentino hubiese lanzado un bono a 100 años sin tener un inversor ancla, que le garantice el éxito de la emisión. Es que justamente la emisión de este bono tiene como objetivo trasmitir optimismo en los mercados, ya que la situación financiera del país mejora y las tasas bajan, mientras más largo el bono más sube el precio.

"Esta operación se enmarca en el objetivo del Gobierno Nacional de asegurar el financiamiento en las mejores condiciones posibles para el crecimiento de la economía y la generación de empleo", informaron desde la cartera de Luis Caputo en un comunicado de una vez concretada la emisión de deuda.

De acuerdo al medio especializado Bloomberg, los encargados de colocar el título a 100 años serían los bancos Citigroup y HSBC Holdings, aunque también se menciona a Santander y Nomura.

Argentina se suma así a países como México, Bélgica e Irlanda, que emitieron deuda a 100 años. El gobierno de Enrique Peña Nieto lo hizo en 2014 con un bono de 1,660 millones de dólares, que tuvo una tasa de 5,75%. Los dos países europeos lo hicieron por 100 millones de euros y con una tasa en torno al 2,3%. 

Es decir que la tasa que pagará el Gobierno argentino resulta muy atractiva para los inversores (en general los bonos a tan largo plazo son "caros") y seguramente generará polémica a nivel local. "Bueno para ellos", dijo a Bloomberg Michael Roche, un estratega de Seaport Global Holdings LLC, que recomienda el bono argentino. "Los spreads son bajos y parecen estancados, por lo que deben bloquearlos durante el mayor tiempo posible", analizó.

En efecto, el caso del bono argentino rendirá casi un punto más. Su rendimiento es de 7,917% ya que la licitación cerró 10% bajo la par, lo que quiere decir que los compradores del bono, pagaron 90 dólares por cada 100 dólares nominales de deuda, que luego rendirá el cupón del 7,125%.

Con este cupón, el spread que Argentina paga es de 575 puntos básicos, en línea con los 550 que paga Petrobras por un instrumento similar colocado en 2015, pero muy por encima de los 321 puntos básicos que pagan en promedio el resto de los países con emisiones similares. Es que la calificación de estos títulos es B3.

Las primeras críticas sobre la tasa las lanzó Axel Kicillof. "Macri piensa emitir a una tasa que nos va a hacer pagar hasta 8 veces el capital que nos prestan", afirmó el ex ministro de Economía.