El Ministerio de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires cerró este miércoles la emisión de dos bonos en pesos por un total de $5.085.871.000 y desafió por el tamaño de la emisión al mercado.

La emisión, que se cursó mediante el Euroclear para facilitar la participación de inversores internacionales, obtuvo una demanda extranjera cercana al 10% de la licitación. En total se recibieron más de 220 órdenes por $5.625.871.000.

Según un comunicado de la cartera de Martín Mura, se colocaron $1.378.066.000 del Bono Clase 19, un título a 18 meses con amortización total al vencimiento, con un cupón de Badlar más un spread de 3,25% anual.

En tanto, del Bono Clase 20 –que tiene un plazo de 5 años con amortización total al vencimiento y pagará un cupón de Badlar más un spread de 5%- el monto emitido ascendió a $3.707.805.000.

Tras el cierre de la emisión, Mura señaló que “se cumple así el objetivo trimestral del plan financiero 2017. Se trata de la mayor emisión en moneda local en el mercado doméstico y con participación de inversores extranjeros. Este resultado es consecuencia de la solidez fiscal, la reputación construida y el compromiso de la gestión actual con la ejecución del plan de infraestructura”.

De esta manera, descontado el efecto de la inflación (esperda), las tasas que pagará la Ciudad se ubican en 3% y el 4,4% reales, más bajas que las tasas de corte de las emisiones de deuda de las provincias en dólares. “Estamos muy satisfechos. Son tasas muy bajas y confiamos que la inflación baje y las tasa Badlar converja en esta baja por lo que estaremos pagando un 5% real. Los inversores nos pedían un piso, pero a la Ciudad le conviene estar en tasa variable para aprovechar la baja”, dijo a LPO una fuente del Ministerio de Hacienda.

Además, como adelantó LPO, con una emisión a cinco años, la Ciudad alcanzó su desafío de inaugurar este tramo de la curva de pesos. En el mercado no hay emisiones en moneda local de este plazo. “Solo la de diez años del Gobierno nacional, pero entre los 48 meses a los diez años no había otra y con esto vamos creando mercado. También creamos mercado al invitar a inversores a participar desde el exterior”, dijo la fuente consultada.

En este sentido, el comunicado de Mura destacó que “la Ciudad puede prolongar su curva de rendimientos en pesos a tasa variable, contribuyendo así al desarrollo del mercado local de capitales”.

En lo otro en lo que la Ciudad fue pionero fue en el volumen de la emisión. Las emisiones subsoberanas en el mercado local acostumbran a ser muy menores, a la vez que en el mercado internacional las emisiones “chicas” también son penalizadas.

En este sentido, la Ciudad estudió la demanda y se animó a probar con una emisión de esta tamaño que cubriera sus necesidades trimestrales en una única licitación. “Creo que vamos a empezar a ver en el mercado local libros de este tamaño de ahora en más. Esto también es crear mercados”, celebró la fuente consultada.

Desde la Secretaría de Finanzas de la Ciudad también avanzaron en el sentido en el que la calificadora Fitch le había mejorado la calificación de la deuda. Con más de $5.000 millones, de la proporción del 80% de deuda en dólares y solo 20% en pesos, pasará a mejorar la composición de la deuda. “Es una recomposición que nos aproxima al 70% y 30%, a la vez que al estirar el cronograma de vencimientos, mejora el perfil del financiamiento”, agregó el funcionario.

“Con esta transacción finalizada, el ministerio continúa con la estrategia planeada de administración de pasivos, buscando modificar la composición de moneda de la deuda y extendiendo la vida promedio del endeudamiento, de acuerdo a lo que han resaltado favorablemente las calificadoras de riesgo”, dijo Mura en su comunicado de prensa.