Armando "Pipi" Traferri es senador del Departamento San Lorenzo y uno de los principales dirigentes del peronismo de Santa Fe, pero desde el 2020 quedó bajo sospecha en una investigación a la red de juego clandestino que comandaba Leonardo Peiti.
Días atrás, el capitalista del juego admitió en una entrevista con LPO haberle aportado al senador Traferri 200 mil dólares para financiar la campaña a gobernador de Perotti en 2019 a cambio de designarlo como proveedor oficial de máquinas para el juego online de la Lotería de Santa Fe, pero eso nunca ocurrió y la interna entre Traferri y el entonces gobernador se desbocó.
La causa comenzó con la investigación del asesinato de un apostador en el Casino City Center en un ataque mafioso y tuvo derivaciones institucionales impactantes cuando se descubrió una red de corrupción y complicidades de las que participaba el jefe de los fiscales de Rosario, Patricio Serjal, un fiscal de grado, Ponce Asahad, y empleados del Ministerio Público de la Acusación.
El organigrama de esta banda que le adelantaba datos sensibles a Peiti para eludir allanamientos a cambio de pagos mensuales se completaría con la pata política: el senador Armando Traferri que fue citado a audiencia para el 7 de octubre y podría quedar imputado como organizador de la asociación ilícita que integraban fiscales y funcionarios judiciales para proteger al capitalista del juego ilegal.
La investigación la impulsaron los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra pero ninguno de los dos estarán en la audiencia del 7 de octubre ni podrán acusar a Traferri porque el primero enfrenta un proceso judicial en una causa enmarañada que lo dejó fuera de juego y Schiappa Pietra fue corrido de la causa luego de un pedido expreso y público que hizo el senador.
En sus lugares, serán los fiscales Marisol Fabbro, José Luis Caterina y María de los Ángeles Granato quienes llevarán adelante la acusación por decisión de la jefa de fiscales María Cecilia Vranicich y el fiscal regional de Rosario, Matías Merlo. "Se prepararon muy bien para esta situación pero es un síntoma de debilidad política que no esté Luis (Schiappa Pietra)", dijeron a LPO fuentes judiciales.
Es que Traferri enfrentará la imputativa luego de haber renunciado a los fueros extraordinarios que prevé la Constitución provincial a los legisladores que ni siquiera permite que sean investigados. De todas maneras, el senador se reservó la inmunidad de arresto.
Ahora, desde que Traferri renunció parcialmente a sus fueros, el panorama político cambió radicalmente. El gobernador Maximiliano Pullaro logró mayoría especial en el Senado que podría dejar al legislador acusado afuera de la Cámara.
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El peronismo santafesino le destraba la reelección a Pullaro y aprobarían la reforma la próxima semana
