
El gobernador Pullaro construye una cárcel de máxima seguridad al estilo Nayib Bukele donde encarceló a miles de pandilleros que dominaban El Salvador. El santafesino ahora abrió la licitación para edificar una mega penitenciaria con capacidad para alojar a 1150 reclusos peligrosos: "ya tiene nombre, se va a llamar El Infierno", comentaron funcionarios provinciales.
En ese sentido, destinarán más de $109 mil millones para levantar el complejo en la localidad de Piñero donde cumplirán condena más de mil delincuentes peligrosos. "Caer allà va a ser lo peor", repiten los funcionarios y aclaran que los controles se llevarán hasta el lÃmite de lo que permita la ley. "Pondremos micrófonos en las celdas si lo permite la justicia y los reclusos no tendrán contacto fÃsico con sus familias, el régimen será super riguroso", prometen.
La idea de Pullaro es que a "El Infierno" se deriven los narcos y sicarios más peligrosos que actualmente se alojan en pabellones de alto perfil pero que los controles dependen del esfuerzo del servicio penitenciario y ahora se busca que la cárcel está diseñada y construida para tal fin, explicaron los funcionarios.
Según el plan que presentó el gobierno, el complejo se dividirá en cuatro "mini penales" con 24 pabellones, 1.152 celdas individuales y cuatro edificios de gobierno. Todo ello, custodiado por 24 torres de vigilancias además de un doble muro perimetral. Serán 46 mil metros cuadrados de superficie cubierta, una ciudadela que albergará a los criminales más peligrosos del sicariato local.
Pullaro espera terminar su mandato en 2027 habiendo construido 6.500 plazas carcelarias "es muchÃsimo porque en 40 años de democracia se construyeron menos de 4.000. Con los recursos que salen del achique, del ajuste y de la administración eficiente del estado vamos a invertir 400 millones de dólares para que no tengamos más problemas en el servicio penitenciario".
El gobernador radical repite que invertirá más de 6.500 millones de pesos en infraestructura y bienes de capital carcelario "el equivalente a diez puente "Santa Fe-Santo Tomé", ilustra en relación a la obra más icónica de su gestión. "Es la provincia que más invertirá en seguridad como ninguna hizo", agrega Pullaro molesto porque "nadie le da pelota a esto", suele decir.
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Qué vergüenza que genere semejante déficit fiscal para privilegiar a los delincuentes por sobre el resto de la sociedad. Un gasto tan grande debe ser enfrentado por el sector privado, que luego puede cobrarle a los presos por alojarse allí y así recuperar la inversión como pasa en los países serios.
Y bueh, un par de muertos mas para que este pelotudo haga teatro.