El retorno a las aulas tras el fin de semana largo quedó empañado por dos ataques a balazos contra los frentes de las escuelas José Mármol y Rosa Ziperovich, ubicadas en el corazón del barrio Empalme Granero, una de las zonas calientes por la criminalidad y la pelea a muerte entre distintos clanes que se dedican al narcomenudeo.
Este lunes, los frentes impactados de las escuelas pusieron en alerta máxima al gremio AMSAFE que decidió desobligar a los alumnos el martes para concentrar frente a la sede de gobierno en Rosario exigiendo a Perotti mayor seguridad para los trabajadores de la educación y repudiando el accionar de las bandas que se disputan el territorio.
Hace poco menos de un mes habÃa sido baleada la Escuela 6.430 "Isabel la Católica" y el sábado fue el turno de las dos instituciones de Empalme Granero: "Es evidente que están usando a las escuelas como mensajeras, pero la duda es ¿hasta dónde están dispuestas a llegar las bandas? ¿La próxima vez será en horario de circulación? Estamos muy preocupados", sostuvo a medios locales Juan Pablo Casiello, secretario general del gremio docente en Rosario.
Es que el populoso barrio cobró trascendencia nacional luego de la pueblada de principios de marzo cuando los vecinos derribaron bunkers de droga cansados de ser rehenes de la violencia narco y tras el crimen sicario del nene de 11 años, Máximo Jerez.
A partir de allÃ, el gobierno nacional dispuso el refuerzo de agentes federales como GendarmerÃa y PolicÃa Federal para patrullar las zonas calientes de la ciudad. En las escuelas se encontraron mensajes que no trascendieron a la prensa para que los medios no se conviertan en los canales de comunicación entre los lÃderes narcos que defienden sus negocios a sangre y fuego.
De hecho, el nene asesinado que derivó en la pueblada, asistÃa a la escuela bilingüe "Rosa Ziperovich" donde asisten alumnos de la comunidad Toba de Los Pumitas, atacada el sábado a la madrugada.
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