Axel Kicillof formalizó junto a al ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, la decisión de sumar a la provincia una hora más de clase en las escuelas primarias de gestión estatal.

Lo curioso es que la firma del convenio ocurre en una semana en que en varias escuelas sólo habrá clases tres de los cinco días de la semana. Eso es porque el martes la Asociación de Trabajadores Bonaerenses (ATE) convocó a un paro nacional, al que adhirió ATE provincia. En tanto, el viernes están pautadas jornadas de perfeccionamiento docente en la ciudad de La Plata.

Se sabe que la crítica más fuerte hacia el gobernador por su gestión de las restricciones durante la pandemia fue el cierre de las escuelas de la provincia durante casi dos años. Eso le costó el cargo a la entonces ministra Agustina Vila, que fue reemplazada por Alberto Sileoni.

"Tenemos que hacer un gran esfuerzo porque en muchos aspectos estamos atrasados", reconoció Sileoni este lunes tras el acto en declaraciones periodísticas que cita la web 0221.

Tenemos que hacer un gran esfuerzo porque en muchos aspectos estamos atrasados. Tenemos chicos que se ausentan de las aulas.

En esta primera etapa la medida incluye a 914 instituciones, alcanzando al 25,1% de las escuelas estatales que hasta el momento contaban con jornada simple y al 23% de la matrícula. Según se informó, la medida impacta en escuelas urbanas y rurales de 120 municipios bonaerenses, tanto del área metropolitana como del interior.

Perczyk resaltó que con la firma del convenio Buenos Aires suma 110 mil horas semanales, equivalentes a más de 450 mil horas mensuales en sus escuelas y explicó que eso significa además un enorme esfuerzo presupuestario del gobierno nacional.

El ministro de Educación precisó además que "más del 60 por ciento de las escuelas del país han incorporado más horas de clase. Son más de 5 millones de horas de enseñanza incorporadas este año para mejorar la lectura, la escritura y matemática".

En el acto de este lunes no estuvieron los gremios docentes, aliados políticos de Kicillof en la provincia. Sucede que meses atrás, cuando trascendió la posibilidad de sumar una hora más de clases a las escuelas, los sindicatos rechazaron de plano la idea.

Consideraban que una medida de esa índole necesitaba mayor coordinación con los docentes. Tanto de SUTEBA como de la FEB, los sindicatos mayoritarios de la provincia, indicaron que se necesitaba una "mayor inversión en las condiciones de infraestructura".

Si bien no se oponían a que se implemente, pedían ser convocados a planificar cómo hacerlo y alertaban que se podían profundizar las desigualdades del sistema.