La oposición evalúa ir a Tribunales para denunciar los supuestos negociados alrededor de la licitación del gasoducto de Vaca Muerta. Esa tesis es la plantea el off the record difundido hacia los periodistas desde el ministerio de Desarrollo Productivo y lo que motivó la salida de Matías Kulfas del gabinete.

Fuentes de la oposición aseguraron Patricia Bullrich, Elisa Carrió y Waldo Wolff evaluaban este sábado una presentación para que la Justicia investigue la licitación de la obra que desató el escándalo.

Es que en el punto más delicado del texto que distribuyó el ministerio que dirigía Kulfas se apuntaba a los términos de la operatoria entorno del gasoducto y se sugería un posible direccionamiento de la licitación.

La oposición se concentró esta tarde en remarcar la gravedad de lo que se expuso desde el interior del propio gobierno. Al cabo, el albertismo terminó acusando al kirchenrismo por corrupción.

En el texto enviado desde Desarrollo Productivo a los periodistas se sugiere la posibilidad de un posible direccionamiento de la obra por parte de la empresa estatal IEASA (la ex Enarsa), gobernada por funcionarios cercanos a Cristina.

Alberto Fernández le pidió la renuncia a Kulfas tras la denuncia de Cristina

"Es IEASA, con funcionarios designados por ella (por Cristina), quienes hacen las licitaciones. Los que no usaron la lapicera como corresponde fueron sus funcionarios de IEASA. Ellos armaron un pliego de licitación a medida de Techint", decía el texto reservado que salió del entorno de Kulfas.

Con el mensaje expuesto por la empresa energética y propalado por la propia vicepresidenta, la oposición salió a reclamar el accionar de la Justicia ante lo que se visibiliza como un posible hecho de corrupción.

"La Justicia debe investigar si hubo comisión de delitos por parte de funcionarios cristinistas en las licitaciones del gasoducto Néstor Kirchner, tal como lo dejaron saber funcionarios de Kulfas y el propio ministro saliente. Este tema no queda en una guerra de declaraciones", sostuvo Mario Negri, jefe del bloque de la UCR en la Cámara de Diputados.

"La salida de Kulfas no puede quedar tapada por la pelea por quién tiene la lapicera. El ministro hizo saber que la la licitación estaba direccionada a una empresa por parte de funcionarios de La Cámpora. La Justicia debe actuar de oficio".

También la diputada Silvia Lospennato fue en esa línea. "Un ministro denuncia corrupción y el Presidente lo echa porque lo hace en off. Otra vez la interna destapó lo olla de la corrupción típica de un gobierno kirchnerista. Nuevamente la Justicia tiene servido en bandeja el tema para investigarlo sin excusas ni dilaciones", escribió en las redes.

Se desborda la interna del gobierno: Cristina acusó a Kulfas de operar en su contra

La avanzada sobre Techint, la multinacional que ganó la licitación para proveer los caños sin costura para el gasoducto comenzó en la tarde del viernes en Tecnópolis cuando Cristina Kirchner cuestionó la cercanía entre Alberto y Paolo Rocca, CEO de Techint.

"Hay que pedir que la chapa laminada que producen en Brasil para hacer los caños la hagan acá, en Argentina", dijo la vicepresidenta sobre el final de su discurso, el tramo más interesante.

En efecto, Techint trae los caños desde su planta de Brasil, sede a la que le gira los dólares a precio oficial que le entrega el Banco Central. Un tema que también indignó a Cristina: "Se giran los dólares entre ellos", afirmó.

LPO reveló semanas atrás que el líder de Techint festejó la decisión del gobierno de avanzar con el gasoducto y hasta invitó a Martín Guzmán a comer a su casa, algo que no hace con cualquiera. Alberto devolvió luego las gentilezas e invitó a Rocca y a Luis Betnaza a cenar a Olivos. Después de esas dos comidas se destrabó el pago de 216 millones de dólares.

Pero además, esos encuentros ocurrieron en el pico de la pelea con Cristina, cuando Alberto buscó aliados para contener la avanzada del kirchnerismo.

Hacia ahí apuntó Cristina. "No podemos seguir dándole 200 millones de dólares para que se paguen entre ustedes mismos, entre empresas subsidiarias que tienen en Brasil", dijo Cristina. Guzmán y Matías Kulfas miraban serios desde la primera fila del auditorio de Tecnópolis.