Hugo y Pablo Moyano metieron una cuña en la interna de la CGT con su llamado a movilizar con el kirchnerismo en contra de la Corte Suprema, algo que rechaza el resto de la conducción.

"Si es algo para reclamar justicia los Camioneros seguramente vamos a participar", afirmó el histórico líder del gremio en referencia a la marcha del 1 de febrero que organizan sectores del kirchnerismo duro y que tuvo apoyo del viceministro de Justicia, Juan Martín Mena. "Son tantas las denuncias contra la Corte que se han hecho que hay que corregir esto", agregó Moyano padre.

Su hijo Pablo, uno de los integrantes del triunvirato que conduce la CGT, también adelantó que "solo, con un camión o con miles, pero acompañando a los trabajadores". "Voy a marchar para exigir de una vez por todas que en la Corte Suprema se haga justicia", agregó el dirigente.

Más directo respecto a la presión a la CGT fue Hugo, quien dijo que la central obrera "debería participar" y apuntó contra sus históricos rivales de Los Gordos. "Algunos no han tenido inconvenientes (con la Justicia) porque siempre han sido sumisos de los poderes mandantes", dijo en relación al sector que fue cercano al macrismo.

La convocatoria de los Moyano genera incomodidad en el resto de la conducción de la CGT, siempre reacia a sumarse a las jugadas del kirchnerismo. Más aún teniendo en cuenta que en la marcha participarán las CTA y la Corriente Federal de los Trabajadores.

En ese sentido, Carlos Acuña fue a contramano de Moyano y dijo que "la CGT no participó de ninguna reunión vinculada a esa manifestación". "A la fecha se desconocen los objetivos de esa concentración", agregó el integrante del triunvirato.

Héctor Dáer, el otro dirigente que comparte la conducción de la CGT, no se refirió al tema pero se descuenta que no apoya la participación de la central, a menos que haya una convocatoria formal del gobierno de Alberto Fernández.