
La muralla que iba a levantar Javier Milei para que no lo abordaran indeseables tras el escándalo mundial de Libra no tuvo los ladrillos suficientes y el libertario fue vÃctima de un papelón en Estados Unidos, al que arrastró a Toto Caputo, luego de no conseguir la foto que querÃa con Donald Trump en su propia casa.
Invitado por la fundación Make America Clean Again, que ni siquiera tiene página web, Milei viajó a Mar-a-Lago, el complejo de 8 hectáreas que tiene el presidente norteamericano en Palm Beach, Florida.
El proceso para convencerlo tuvo dos etapas, una tentadora y otra extorsiva. Primero le dijeron que serÃa premiado junto a Trump con el galardón de "American Patriot", pese a que el libertario es presidente de los argentinos. El canciller Gerardo Werthein rechazó la invitación en primer orden, ya que no entraba en la agenda de Milei.
Por eso los organizadores John Rourke y Glenn Parada apelaron a la fibra sensible y le hicieron saber a la Rosada que Trump se sentirÃa desairado si Milei no asistÃa a su complejo residencial. "El Premio es para los dos presidentes, la idea es que lo reciban juntos", afirmaron. Un argumento que barrió las tibias defensas del entorno de Milei, siempre dispuesto a recibir un premio, por más ridÃculo o desconocido que sea.
La pregunta es que que pasa en el entorno más cercano a Milei, es decir su hermana, que aventureros de todo tipo acceden casi sin dificultades al Presidente.
Milei se tomó el avión de súbito y llegó a Mar-a-Lago a las 21 junto a su hermana Karina, que se suele obnubilar con los contactos desde el extranjero. El presidente también se llevó a Luis Caputo, confiado en que podrÃa, en algún momento de la velada en el que se cruzara a Trump y sus funcionarios, meter el tema del FMI y los aranceles.
Pero lejos de negociar temas de Estado, Milei se tuvo que conformar con fotos de revista de espectáculos de influencers noventistas como la que se sacó con Natalia Denegri, célebre por el escándalo del Caso Coppola, reconvertida al evangelismo y la filantropÃa desde que reside en Estados Unidos.
La única funcionaria que asistió a la premiación fue la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, que levantó campamento cuando se enteró que Trump no asistirÃa.
Lo mismo hicieron Milei y la comitiva argentina, cuando alrededor de las 22 recibieron el mensaje del Servicio Secreto que les confirmaba que Trump estaba ahà cerca en Miami en una cena en la que permanecerÃa hasta las 23 y luego regresarÃa a Mar-a-Lago, pero sólo para dormir en su casa. "El presidente Trump no va a asistir al evento", fue el mensaje terminante.
El organizador Glenn Parada, un pastor evangélico con la friolera de 198 seguidores en Twitter, salió a hablar en Radio 10 y dijo que si Milei hubiera esperado sólo 15 minutos, se habrÃa cruzado con Trump. "Hay hubieran tenido foto, video y encuentro", vendió el evangélico. En el gobierno argentino afirman que Parada volvió a mentir, ya que Trump nunca tuvo en sus planes pegarse una vuelta por el salón de su club de campo.
El salón, de hecho, se alquila para eventos. La jugada de Rourke y Parada fue hábil: reservaron el salón ubicado a metros del dormitorio de Trump para darle a los invitados la sensación de que participarÃan de la intimidad del hombre más poderoso del mundo.
Cuando salÃan desazonados del evento, los argentinos se cruzaron con Parada y Rourke y hubo una discusión vehemente. Werthein les dijo que le daba vergüenza ajena el engaño de los capos de Make America Clean Again, que habÃan prometido una reunión con Trump que sabÃan que no ocurrirÃa.
En un intento por defendese, Rourke y Parada dijeron que ellos nunca habÃan prometido algo semejante y, por las dudas, este viernes borraron los mensajes de Whatsapp en los que garantizaban la presencia del republicano.
El papelón generó ruido en el gabinete argentino. "La imagen de Milei sentado con celebrities noventosas bailando YMCA fue trágica para el paÃs", se quejaron fuentes diplomáticas.
El paso en falso fue aprovechado por enemigos internos de Werthein. El embajador Luis MarÃa Kreckler, por caso, le mandó un mensaje a Karina autopostulándose para la CancillerÃa.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
¿Y cuál es el problema? Argentina está en el continente americano. Milei lucha sin cuartel por la libertad en todas partes del mundo y merece ser reconocido como un patriota americano.
"Por eso los organizadores John Rourke y Glenn Parada apelaron a la fibra sensible y le hicieron saber a la Rosada que Trump se sentiría desairado si Milei no asistía a su complejo residencial. 'El Premio es para los dos presidentes, la idea es que lo reciban juntos', afirmaron"
Hizo bien Milei en viajar hasta allá. Está bueno que sea consciente del enorme poder que posee y de lo que representa para otros de los líderes del mundo siendo que él es uno de los cinco principales. Es lógico que un admirador suyo como Trump esté loco por conseguir una foto con él, principalmente por la importancia que tiene Milei en el electorado estadounidense, que está fascinado con su éxito en un país al que le prestan tanta atención como Argentina.
"Milei se tuvo que conformar con fotos de revista de espectáculos de influencers noventistas como la que se sacó con Natalia Denegri, célebre por el escándalo del Caso Coppola, reconvertida al evangelismo y la filantropía desde que reside en Estados Unidos"
No es poca cosa que Milei se haya cruzado con una de las principales intelectuales de la Argentina contemporánea como Natalia Denegri. Sería algo así como que un presidente argentino se cruzara a José Luis Borges en la década del 1960.
"El organizador Glenn Parada, un pastor evangélico con la friolera de 198 seguidores en Twitter, salió a hablar en Radio 10 y dijo que si Milei hubiera esperado sólo 15 minutos, se habría cruzado con Trump"
Milei también es un importante influencer en twitter. Se deben conocer de ahí. Qué pena que los presidentes no coincidieron. Milei tampoco lo puede esperar toda la vida a Trump para cumplirle el caprichito de tener una foto con él para aprovecharla en Estados Unidos. Es un tipo sumamente ocupado.
"Cuando salían desazonados del evento, los argentinos se cruzaron con Parada y Rourke y hubo una discusión vehemente. Werthein les dijo que le daba vergüenza ajena el engaño de los capos de Make America Clean Again, que habían prometido una reunión con Trump que sabían que no ocurriría. En un intento por defendese, Rourke y Parada dijeron que ellos nunca habían prometido algo semejante"
¿Y por qué se indigna tanto Werthein si el que se desvivía por una foto con Milei -y se quedó con las ganas- era Trump? En todo caso se tendría que quejar Trump de que no le avisaron a qué hora iba a andar por ahí Milei.
"El papelón generó ruido en el gabinete argentino. 'La imagen de Milei sentado con celebrities noventosas bailando YMCA fue trágica para el país', se quejaron fuentes diplomáticas"
¿Por qué? Tenemos un presidente joven, canchero y sobre todo muy pintón que de vez en cuando se dedica a distenderse en medio de su apretada agenda. ¿Qué tiene de malo que haya bailado el principal hit del momento en un evento tan importante? Ya se quejan de cualquier cosa...