Un recambio de piezas en el Vaticano impacta de manera directa en el gobierno de Alberto Fernández. El papa Francisco desplazó al obispo argentino Marcelo Sánchez Sorondo, el nexo de Gustavo Béliz y Martín Guzmán con la Santa Sede.

Sánchez Sorondo era hasta hoy el canciller de las Academias Pontificias de Ciencias y de Ciencias Sociales del Vaticano, dos instituciones importantes en la estructura del Vaticano. El argentino ocupaba ese cargo desde 1998 y ganó poder desde que la asunción de Francisco.

El argumento formal que surgió desde el Vaticano es que Sánchez Sorondo, de 79 años, habría pedido su salida por motivos de edad. El argentino había presentado su renuncia al cumplir los 75 años, edad de jubilación establecida para los prelados, pero el Papa hasta ahora no lo había autorizado a dejar su cargo.

Para el gobierno argentino es un problema porque Sánchez Sorondo era el nexo con Béliz y Guzmán, que en los últimos dos años fueron nombrados como miembros de la Academia Pontificia de Ciencias Sociales. El Papa ha sido clave en el apoyo político a Guzmán para la renegociación con el FMI.

En círculos políticos la salida de Sánchez Sorondo fue interpretada como un triunfo de Juan Grabois, que se fortalece como el nexo más importante con el Vaticano. Además de su histórica amistad con el Papa Francisco, el líder de la UTEP tiene línea directa con el nuevo canciller de las Academias.

La salida de Sánchez Sorondo fue interpretada como un triunfo de Juan Grabois, que se fortalece como el nexo más importante con el Vaticano. Además de su histórica amistad con el Papa Francisco, el líder de la UTEP tiene línea directa con el nuevo canciller de las Academias

El Papa nombró como nuevo canciller de las Academias al cardenal ghanés Peter Turkson, un "papable" que hace algunas semanas había sido desplazado tras cinco años de la conducción del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, el "ministerio social" del Vaticano.

 Grabois fue nombrado el año pasado como miembro del Dicasterio de Desarrollo Humano Integral del Vaticano que conducía Turkson y que es el órgano encargado de la aplicación los programas de la encíclica Laudato si'.

La salida de Turkson del "ministerio social" del Vaticano se dio en medio de una polémica porque habría sido consecuencia de una investigación interna ordenada por Francisco. Pero el ascenso del ghanés parece dar por tierra las versiones.