El gobierno nacional finalmente decidió que Santiago Cafiero participará de la asamblea anual de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que se realizará esta semana en Perú, a pesar de un amague de boicot para complicar a Luis Almagro.

En principio el canciller no tenía previsto viajar a Lima, en un mensaje político en contra del secretario general de la OEA, a quien Alberto Fernández le pidió que diera un paso al costado en la cumbre de Los Ángeles, en junio pasado.

Pero la posición inicial de Cafiero cambió radicalmente cuando se confirmó que el secretario de Estado de los Estados Unidos, Anthony Blinken, viajará a Perú.

En el gobierno ahora confirman que Cafiero irá a Perú para tratar de juntarse con Blinken y tratar de definir una fecha para la reunión entre Alberto y Joe Biden, suspendida en julio pasado por el positivo de Covid del presidente estadounidense.

Alberto viajó hace dos semanas a Estados Unidos para la Asamblea General de las Naciones Unidas, pero no logró que Biden le diera la bilateral. En el gobierno dicen que la reunión "está confirmada", pero que falta ponerle fecha.

En la cumbre de la OEA en Lima, Estados Unidos empujará un fuerte mensaje contra Nicaragua por las violaciones a los derechos humanos, un tema álgido para el gobierno argentino.