
Como parte de un acuerdo de "gobierno a gobierno", Estados Unidos celebró la compra de radares Northrop Grumman AN/TPS-78 por parte de Paraguay, luego de rechazar a unos nueve oferentes, entre ellos la argentina Invap, que pugnaban por quedarse con la inversión. Las negociaciones, según fuentes del Gobierno de Santiago Peña, buscaban evitar intermediarios para garantizar la transparencia de la transacción, concretada a través del programa de Ventas Militares al Extranjero (Foreing Military Saley, en inglés) de EEUU.
La inversión, que ronda los USD 100 millones, tiene como objetivo aportar tecnologÃa de punta en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, sobre todo por el nivel de vulnerabilidad del espacio aéreo paraguayo, que en varias ocasiones fue foco de cuestionamientos por parte de Argentina y Brasil.
Máxima preocupación de las FFAA de Brasil ante el avance del crimen organizado en Paraguay
"Conversé con el secretario de los Estados Unidos, Marco Rubio, reafirmando nuestro compromiso de fortalecer la cooperación en seguridad, lucha contra el narcotráfico y desarrollo tecnológico" explicó el presidente en X luego de conversar con el jefe de la diplomacia estadounidense, ayer miércoles por la tarde. Peña destacó además "la histórica adquisición de un sistema de radar primario a través del programa FMS, un paso clave para mejorar la vigilancia áerea".
El anuncio de la compra fue realizado por el ministro de TecnologÃas de la Información, Gustavo Villate, quien explicó que con los AN/TPS-78 de alto alcance se consiguió además instalar un centro de monitoreo y control que integrará los radares móviles adquiridos en el pasado y radares civiles.
El contrato incluye entrenamiento de personal, la instalación del centro de mando y control y respuestos. Con la compra ya consumada se pondrá en actividad, a partir de junio, dos radares móviles Elta EL/M 2106NG 3D, adquiridos en 2012 y con un alcance máximo de 80 kilómetros. Se prevé la capacitación de 20 técnicos, 20 operadores de radares y otros 20 operadores del centro de mando y control.
En tanto, la propuesta de Invap consistÃa en la provisión de tres radares RPA-200M móviles, también de largo alcance y de vigilancia terrestre, seis radares RPA-200F fijos y el centro de comando y control, que además favorecÃa la integración con la Fuerza Aérea Argentina en lo que hace a la supervisión de los cielos en puntos crÃticos de la frontera.
Hace casi un año, en abril, el presidente participó del exclusivo foro de empresarios de Llao Llao en Bariloche. Peña aprovechó el viaje para visitar la sede de Invap y conocer de primera mano los radares argentinos. El Gobierno contemplaba entonces la tecnologÃa argentina como una forma de recomponer el vÃnculo bilateral tras el impasse por el peaje en la hidrovÃa y la deuda en Yacyretá.
"Fue una acuerdo entre los gobiernos. Se presentaron nueve oferentes, pero se optó por el gobierno americano. Son muy buenos radares e incluye entrenamiento, centro de mando, repuestos y garantÃa. Fue un proceso que en todo momento buscó la transparencia", dijo a LPO una alta fuente de seguridad del Ejecutivo.
La compra de los radares estadounidenses fue un tema obligado en la conversación que mantuvieron Peña y Rubio. El Gobierno quiere relanzar la relación con Washington después de los choques constantes con la administración Biden, lo que llevó al presidente a inclinarse por los Northrop Grumman. La llamada se dio poco antes de que Peña oficializara la declinación de la candidatura de Rubén RamÃrez Lezcano a la OEA.
Para el 15 de mayo se prevé la llegada de los seis aviones Super Tucanos comprados a la brasileña Embraer. Se trata de otra inversión clave para dar una lucha frontal al tráfico aéreo de estupefacientes focalizado en la frontera con Brasil y Bolivia. La inversión en las aeronaves rondaba los USD 105 millones y los fondos fueron parte de un préstamo del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.