
El Gobierno de Santiago Peña pidió dejar sin efecto la primera nota en la anunciaba el cese de la cooperación entre la Senad y la DEA, luego de que el presidente deslizara una "reestructuración" de la asistencia con la agencia antidrogas de Estados Unidos. El anuncio lo encabezó Cibar BenÃtez, secretario del Consejo de Defensa Nacional (Codena), que apareció esta mañana en Mburuvicha Róga acompañado por Paula Carro, la vocera presidencial, y el ministro del Interior, Enrique Riera.
La conferencia fue incómoda porque BenÃtez dijo que no traÃa consigo la respuesta de la DEA, ni reveló su contenido, pero según pudo saber LPO, la agencia estadounidense amagó con hacer un inventario del equipamiento destinado a la cooperación con la SecretarÃa Nacional Antidrogas a cargo de Jalil Rachid. "Fue un mal entendido. Necesitamos de la DEA", admitió el contralmirante.
Peña deja en offside a Rachid y dice que la Senad seguirá trabajando con la DEA
"Pedimos dejar sin efecto la nota 712 donde se entendió que querÃamos cortar la relación con la DEA y eso no es cierto. No es solo la Senad la que está en el convenio. Vamos a seguir con la DEA", confirmó BenÃtez. Después de una semana de idas y vueltas y de salidas evasivas, el titular de Codena sugirió que la cooperación podrÃa extenderse a la Secretaria de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad), cuando en un principio iba a ser redireccionada a la PolicÃa Nacional, bajo la órbita de Carlos BenÃtez y Riera.
Para sumar otra arista al desconcierto, Gustavo Villate, ministro de TecnologÃas de la Información y Comunicación, aseguró que desconocÃa si la DEA habÃa respondido a la carta de Rachid. El Gobierno intentó recular sin querer pagar el costo polÃtico y diplomático, y Peña envió a BenÃtez, su hombre de mayor confianza en el área de seguridad, a remendar el traspié y desautorizar públicamente al ministro de la Senad.
Hasta ahora, ningún funcionario explicó por qué Rachid se cortó solo con la nota que deberÃa haber llegado a la embajada de EEUU en Asunción a través del Ejecutivo, y no mediante una autoridad de segunda lÃnea. Rachid, que habÃa desconocido el convenio firmado con la DEA en 2022 y no esperaba una respuesta contundente por parte de EEUU, tuvo que enviar una segunda nota para asegurar la continuidad del programa SIU (Unidad de Inteligencia Sensible).
Con todo, Rachid descartó su renuncia. "Esta es una decisión polÃtica. El presidente de la República estaba al tanto de ambas decisiones. Yo formo parte del Ejecutivo, soy una secretarÃa dependiente del Ejecutivo y me debo al Ejecutivo. Yo no le darÃa la denominación de papelón si es un cambio para bien", se defendió. En el gabinete de seguridad hay molestia con el ministro de la Senad porque consideran que Peña quedó demasiado expuesto.
La referencia de BenÃtez a la Seprelad está en lÃnea con la idea de un acuerdo de cooperación "más fuerte y más robusto" que postuló Peña el lunes desde el Palacio de López, pero la oposición entiende que fue una salida improvisada frente a la reacción de EEUU. Algunos senadores como Eduardo Nakayama y Esperanza MartÃnez especularon con que Rachid sea echado de su cargo.
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