
A diferencia de gobiernos pasados, la administración de Santiago Peña se caracteriza por blindar a sus ministros y mantenerlos en capilla o al filo de la destitución durante en lo que va de mandato. Durante los primeros meses del año, algunos nombres volvieron a aparecer en la lista de posibles eyectados. De hecho, durante última reunión del Consejo de Ministros ayer miércoles, el presidente animó a su equipo a redoblar esfuerzos si es que no quieren irse a sus casas.
El ministro de Educación y Cultura (MEC), Luis RamÃrez, es uno de los jaqueados por su flaca gestión. Los colorados cartistas y los gremios docentes vienen exigiendo su salida casi desde el primer momento en que desembarcó en el cargo. RamÃrez sigue surfeando las denuncias públicas por irregularidades en la provisión de los kits escolares y el estado calamitoso de no pocas escuelas a lo largo y ancho del paÃs. Los propios funcionarios del MEC y los maestros incluso lamentan su débil liderazgo.
El cartismo quiere que Barán pague el costo polÃtico por el caso de Villarrica y choca con Peña
Ramirez declaró el primer dÃa de vuelta a clases como el dÃa nacional de los kits escolares. A pesar de contar con el presupuesto asignado, el ministro solo pudo cubrir el 70% de la demanda. "El ministro de Educación debe renunciar a su cargo. El Congreso cumplió al 100% con el monto solicitado para los kits. Esta negligencia no solo retrasa el inicio del periodo escolar, sino también la inversión en educación", señaló Billy Vaesken. Pero el diputado liberal es apenas uno de los crÃticos a la gestión de RamÃrez.
En las últimas negociaciones con los gremios, los maestros y funcionarios debieron pedir en varias ocasiones la intervención del senador Derlis Maidana para cerrar el presupuesto con los representantes de EconomÃa, en una clara muestra de orfandad respecto a su cartera natural. Marzo es la fecha de tope para presentar las ampliaciones presupuestaria que nuevamente pondrán a prueba el nivel de negociación de todos los sectores. "Es un inútil. Desde que asumió siempre estuvo en la cuerda floja. No tiene capacidad de liderazgo y fue una decepción para todos porque lo conocÃamos", dijo a LPO un gremialista docente.
La segunda que podrÃa dejar el gabinete es Barán, que tras la destitución de Miguel Olmedo no pudo hacer mucho para capear la crisis sanitaria. Salud enfrenta un problema en lo que hace a la entrega de medicamentos y la contratación de personal médico capacitado, un hecho que incomoda a la dirigencia colorada, que usualmente es la encargada de acercar a la población los recursos y la asistencia del Estado.
Tras la muerte de un recién nacido en Villarrica, la ministra asistió a la comisión de Salud y Seguridad Social del Congreso para defender su gestión. Integrada en un 90% por miembros de la bancada de Honor Colorado y sus aliados, la oportunidad solo sirvió para exponer el blindaje polÃtico que le ayudó a deslindarse de toda responsabilidad. Barán volvió a echarle la culpa al exdirector del hospital y se mostró dubitativa cuando un periodista le preguntó si Peña le habÃa sugerido que su tiempo se acababa.
Fuentes que conocieron los entretelones de la reunión de ayer confirmaron a LPO que fue un cara a car áspero, donde por primera vez Peña se mostró inflexible con sus ministros. PodrÃa tratarse un punto de quiebre para el presidente, que hasta ahora resisitió las presiones internas y externas para hacer cambios en su equipo. Peña sigue apostando por los perfiles técnicos, como el de Barán, aunque también quiere ver resultados y, sobre todo, preservar al Gobierno de cualquier escándalo.
Sin embargo, por los pasillos del Senado y de Mburuvicha Róga creen que Barán tiene las horas contadas. Su posible reemplazante serÃa el senador Antonio "Tony" Barrios, que durante el gobierno de Horacio Cartes ocupó esa cartera. La salida de Barán no solo es exigida por colorados, sino también por los gremios de enfermeros y médicos.
Confirmado: Lezcano se quedó sin apoyos y baja su candidatura a la OEA
Los profesionales del ámbito sanitario admiten que su destitución se viene atrasando debido a los negocios con las farmacéuticas que involucran a figuras y parientes del Ejecutivo. También sonó fuerte la vuelta de Olmedo al sistema de salud, pero para ocupar un cargo en el Instituto de Previsión Social (IPS), un nombramiento que se dilata desde hace ya un buen tiempo.
El nuevo en la lista, y a consecuencia de los inconvenientes con el programa Hambre Cero, es el ministro de Acción Social, Tadeo Rojas. La denuncia de Mercedes Jacquet, directora del Colegio San Jorge de Mariano Roque Alonso, sobre las condiciones de los alimentos que son entregados en el plan de alimentación lo ubicaron en el ojo de la tormenta. Pero las informaciones sobre su potencial salida se diluyen debido a que el exdiputado es una pieza fundamental en el engranaje del comando polÃtico de Honor Colorado.
DÃas atrás, Rojas participó junto al presidente del primer encuentro del comando con miras a las municipales. La bajada del primer anillo de Honor Colorado fue clara y directa hacia el Ejecutivo acerca de la necesidad de abrir los cupos en el Gobierno central para dar oxÃgeno a lÃderes regionales sobre quienes recaerá la campaña de 2026.
El último en la lista negra es Rubén RamÃrez Lezcano, a quien algunos cartistas responsabilizan por el papelón en la OEA. El senador Gustavo Leite le pidió explicaciones por el giro de los paÃses del Mercosur, y su par de la oposición Rafael Filizzola apuntó a los recursos invertidos en la campaña.
Aunque la candidatura del canciller no fracasó por falta de iniciativa, sino por cuestiones geopolÃticas, Peña entiende que los crÃticos con su polÃtica exterior pedirán la cabeza de Lezcano. Por estas horas, en el Gobierno debaten si el ministro de Exteriores continúa en el cargo o si se le ofrece ser el próximo embajador de Paraguay en Washington, una salida decorosa que podrÃa ser aprovechada por Peña en su estretegia de acercarse a la Casa Blanca.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.