El presidente Santiago Peña viajó este jueves a Brasil donde tiene previsto visitar varias industrias en los municipios de Campo Grande, Dourados, Porto Murtinho y Ribas do Rio Pardo, en el estado de Mato Grosso del Sur.
Esta nueva gira se da en medio del escándalo de los sobres y las denuncias de represión de la PolicÃa a los manifestantes de la "Generación Z", sin una reunión con Lula da Silva en la agenda.
De acuerdo a lo informado por Presidencia, Peña participará hoy y mañana viernes de reuniones con "autoridades locales" y verificará los avances en el Puente de la Bioceánica, que conectará Porto Murtinho y Carmelo Peralta. Sin embargo, ningún funcionario del Gobierno federal tiene previsto participar de las actividades.
En Brasil temen que el alineamiento de Peña con Trump embarre las negociaciones por Itaipú
El presidente llegó hasta el paÃs vecino para fortalecer la integración regional, la red logÃstica y las oportunidades que se abren con la Ruta Bioceánica, un proyecto que busca conectar el Atlántico con el PacÃfico y apunta a reducir los tiempos de transporte de productos brasileños hacia Asia. Paraguay quiere ser parte de esas cadenas.
A inicios de setiembre, Peña estuvo en Brasil, donde se reunió con el gobernador del estado de Paraná, Ratinho Junior, y con empresarios e inversores del sector agroindustrial, en un intento por atraer inversionistas al paÃs. También participó de la reunión ordinaria de la Organización de Cooperativas del Paraná (Ocepar).
Lo llamativo del caso es que Peña no tiene en sus planes una reunión oficial con su par brasileño, a pesar de que ya van dos viajes consecutivos al paÃs vecino en menos de un mes. El motivo de este desencuentro es el caso de espionaje a autoridades paraguayas por parte de la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin).
La responsable del ciberespionaje serÃa una organización paralela vinculada al expresidente Jair Bolsonaro, si bien las actividades ilegales continuaron durante el mandato de Lula, según reveló meses atrás el portal UOL.
Lula deja en segundo plano el caso de espionaje y lo apura a Santi por Itaipú
La agencia utilizó un software de intrusión para hackear dispositivos de funcionarios paraguayos vinculados a las negociaciones sobre la tarifa eléctrica de Itaipú, lo que complicó mucho más la renegociación del Anexo C. Los mandatarios decidieron dejar de lado sus diferencias, en medio de las tensiones, pero lo cierto es que aún no se retomaron las conversaciones en torno a la binacional.
En julio, Peña y Lula se vieron antes de participar de la cumbre de presidentes del Mercosur en Buenos Aires, donde el mandatario paraguayo le reiteró su preocupación por el caso del espionaje. De acuerdo al diario brasileño Gazeta do Povo, el acuerdo no se cerrarÃa sino hasta finales del año que viene.
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