
Mburuvicha Róga fue la sede de la reunión que mantuvieron Santiago Peña y los diputados que salieron de Fuerza Republicana para sumarse a Honor Colorado. También estuvo el gestor de este pase, el vicepresidente Pedro Alliana, que además sumó a gobernadores disidentes al cartismo.
"Gracias a los diputados y gobernadores que han comunicado que dejan el movimiento Fuerza Republicana para acompañar más de cerca la lÃnea del gobierno. Tenemos muchas coincidencias que nos unen y que vamos a anteponer para beneficiar a todos los paraguayos", expresó Alliana en redes sociales.
Fuerza Republicana queda con apenas media docena de diputados que se resisten a responder a Horacio Cartes y aseguran que su lÃder sigue siendo Mario Abdo BenÃtez, quien descansa en su casa luego de los intensos cinco años de presidencia. Esa resistencia es el único obstáculo que impide unificar las bancadas coloradas en Diputados, aunque la mayorÃa del mermado abdismo reconoce públicamente que apoyarán la gestión de Peña.
El silencio de Abdo es lo que alegan varios de los diputados como motivo de su salida. Muchos señalan que hace tiempo se sienten a la deriva, sin la orientación clara de un lÃder, sosteniéndose solo por camaraderÃa y buena voluntad, como apuntó Hugo Meza. En el Senado ya no queda nadie que responda a Marito, aunque sigan en disidencia o, en otras palabras con reticencia al liderazgo de Cartes.
La reunión con Peña confirma las motivaciones de este traspaso de un movimiento a otro: los diputados y gobernadores necesitan de las ventajas de estar con el gobierno, y esta carta la usaron finalmente desde el cartismo, ya que si bien todos se comportaban como oficialistas, no eran tratados con los mismos privilegios que los miembros de Honor Colorado.
Por su parte, también blanqueó su posición polÃtica en la reunión el diputado Jatar Fernández, que ingresó por Cruzada Nacional, pero desde el inicio se alineó al cartismo.
Peña calificó la decisión de los legisladores y gobernadores como una señal de "madurez polÃtica". Los diputados que rechazan integrar el cartismo, como Mauricio EspÃnola, Roberto González y Daniel Centurión, insisten en que apoyan a Peña y están dispuestos a respaldar al gobierno como oficialistas en una bancada única, pero con la condición de no tener que responder a la conducción de Cartes.
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