Santiago Peña sentó postura sobre el proyecto de control a las organizaciones no gubernamentales que se aprobó en el Senado y está en estudio en Diputados, con mucho retraso. El presidente dejó en claro su rechazo y anunció que podrÃa vetarlo si llega al Ejecutivo porque tiene "errores muy grandes". Con su posición, Peña se apartó totalmente de los senadores del sector más radical del cartismo que impulsó la ley.
Es la primera vez que el presidente rechaza el proyecto e incluso llegó a justificar la iniciativa parlamentaria con el argumento de que las ONG pueden usarse para lavar dinero. Sin embargo, no se mostró en contra de que exista una ley, sino que solo anunció que desde el Ejecutivo van a plantear modificaciones, sin dar detalles de cuáles serÃan esos cambios.
"Como Poder Ejecutivo hemos revisado el texto, nos preocupa también, hemos planteado modificaciones sustanciales al proyecto, hemos mirado la legislación internacional, la comparada, la nuestra. Queremos la transparencia, este es un sector demasiado importante, la sociedad civil encuentra en estas organizaciones la forma de involucrarse en polÃticas públicas. Claramente, el proyecto en la versión del Senado tiene errores muy grandes", remarcó.
En Diputados también se plantean modificaciones, aunque no se conoce a ciencia cierta el sentido de los cambios. Mientras tanto, los senadores, sobre todo Gustavo Leite y Lizarella Valiente, los más radicales de la bancada de Honor Colorado en la cámara alta, insisten en dirigir la norma hacia las organizaciones que son opositoras al gobierno.
Las ONG denunciaron que el proyecto que recibió media sanción del Senado es persecutorio y además atenta contra la democracia por tener tintes autoritarios. Incluso la compararon con la ley vigente en la Venezuela de Nicolás Maduro. Los controles que plantea la ley son excesivos, indicaron, porque la sociedad civil ya rinde cuentas a todas las instituciones.
"Estamos trabajando, planteando estos cambios para que se mantenga el concepto de la transparencia, porque saben que para abrir una cuenta en un banco para las organizaciones de la sociedad civil es super difÃcil, son instituciones de alto riesgo porque también se suelen utilizar para manejos poco transparentes del dinero", advirtió Peña este jueves durante un acto en la Expo Negocios.
De esta forma Peña intenta calmar al sector de las organizaciones no gubernamentales y se aparta de los senadores más radicales. Además, para el presidente, esta normativa representó una crisis de su imagen pública porque no solo se levantaron advertencias a nivel nacional, sino que internacionalmente hubo alertas de transgresión a la democracia.
Leite y Dionisio integrarán la comisión antilavado y la oposición decide no participar
De todos modos, mientras Peña intenta apartarse de las polémicas del cartismo, los promotores de la ley siguen acumulando argumentos para presionar contra la sociedad civil. Leite convocó desde la comisión antilavado al fiscal general Emiliano Rolón, quien le comunicó que el Ministerio Público tiene 369 carpetas de casos de lavado de dinero.
También recibió información de Óscar Orué, director nacional de Ingresos Tributarios, quien dio el detalle de que en total rinden cuentas unas 6.600 ONG. La comisión le dio un plazo de 10 dÃas para que presente precisiones sobre montos.
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