Partido Colorado
Nicanor da por hecha la desaparición del abdismo: "No hay disidencia interna en el Gobierno"
"No tenemos grietas visibles que pongan en peligro la estabilidad del país", apuntó. El exmandatario sigue acercándose al cartismo para conservar su estructura politica ubicada en el gobierno.

El proceso de unificación en marcha dentro del Partido Colorado no encuentra oposición o contrincante en ningún movimiento interno. Este tsunami doblegó incluso al expresidente Nicanor Duarte Frutos, que en el último mes viene defendiendo un discurso conciliador puertas adentro de la ANR.

El exdirector ejecutivo de Yacyretá negó este lunes la existencia de cualquier grieta o división entre el supuesto "peñismo" y cartismo, y aseguró que se trata de una disputa que intenta instalar la oposición.

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"No hay grietas. No tenemos grietas visibles que pongan en peligro la estabilidad del país. No tenemos convulsiones sociales Hay un país que está creciendo económicamente. Los niveles de desempleo no son altos", señaló Duartes Frutos a 780 AM. El expresidente parece encomendado a proteger a sus seguidores enraizados en el Estado, como demostró las paces que hizo con Horacio Cartes a finales de octubre. 

Nicanor también negó la posibilidad de que el presidente esté iniciando una carrera de posicionamiento que dé forma a una fuerza política propia desde la sombra de Cartes. "Yo creo que hay un partido que trabaja en su campo específico y un Ejecutivo que va avanzando de manera visible en la consecución de los grandes objetivos. Si somos ineficientes, si fracasamos, va ser culpa nuestra", subrayó.

Con todo, Nicanor relativizó el rol de la oposición porque "no existe". Tampoco "hay una disidencia interna", zanjó, con lo que dio por hecha la disolución del abdismo y la pérdida de músculo del sector díscolo dentro del Partido Colorado, donde hasta hace poco se ubicaba el expresidente. 

Los expresidentes Horacio Cartes y Nicanor Duarte Frutos.

Semanas antes de la reunión con el líder de la ANR en la sede partidaria, Duarte Frutos fue reprendido por el vicepresidente Pedro Alliana por la deuda dejada en la Entidad Binacional Yacyretá, que orillaba los 60 millones de dólares e impedía el pago de salarios a funcionarios. La acusación desató un idea y vuelta entre el expresidente y el número dos del Ejecutivo.

No tenemos convulsiones sociales Hay un país que está creciendo económicamente. Los niveles de desempleo no son altos

Esa deuda habría obligado a la administración paraguaya de Yacyretá a solicitar un préstamo de 48 millones de dólares y, en simultáneo, a profundizar una crisis diplomática con la Argentina por la falta de pagos.

En este enfrentamiento, Nicanor Duartes Frutos desafió al vicepresidente a comparar su administración con otras y sostuvo que no temía "ninguna represalia contra su cupo político en la entidad". "Alliana hoy es vicepresidente gracias a la generosidad del pueblo colorado", apuntó en su momento.

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