
El ministro de Educación, Luis RamÃrez, está en la mira de los Diputados no solo por la falta de resultados de los diversos programas en ejecución desde agosto, sino por cuestionamientos a la transparencia y la rendición de cuentas de su gestión. La desprolijidad en el manejo de los recursos, en particular a lo que hace al programa Ñe'ery, que contó con una inversión de 12 millones de dólares, genera alarma en el Congreso y en el Ejecutivo.
Los docentes admitieron que deben financiar de su bolsillo la compra de libros o cartulinas para cumplir con los requerimientos del programa ante la ausencia de desembolsos. DÃas atrás, el ministro cumplió su amenaza y echó a su viceministra, MarÃa Gloria Pereira, por los pocos avances en el programa de lectoescritura y en la recolección de datos solicitada por el Ministerio deDesarrollo Social para el programa de Hambre Cero, que puso contra las cuerdas a los sindicatos docentes.
RamÃrez prepara la salida de Gloria Pereira mientras Mora y Kemper buscan quedarse con el MEC
La crisis se agudiza aún más ante el nivel de incertidumbre que provoca la posible destitución de RamÃrez, que se anuncia para los primeros dÃas de agosto. En su reemplazo asumirÃa el viceministro de Educación Superior, Federico Mora, que cuenta con el apoyo de la senadora, Lizarella Valiente, esposa del Óscar "Nenecho" RodrÃguez, de quien hasta hace poco fue su jefe de gabinete.
Ñe'ery obliga a las escuelas públicas a crear espacios de lectura como centro de las interacciones pedagógicas y sociales. Este programa es patrocinado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) en el marco del proyecto "Impulsando la Educación", financiado por la Unión Europea. El propósito de la inversión es lograr que los alumnos puedan acceder a momentos de lectura con los maestros para el desarrollo personal.
Sin embargo, según comentaron fuentes del MEC a LPO, el proyecto fue ejecutado sin ningún tipo de control y capacitación de los docentes. Incluso algunas organizaciones de maestros denunciaron que sus colegas se limitan a sacar fotos de sus alumnos posando con libros para remitirlas a la supervisión como prueba de la ejecución del proyecto.
"Es una feroz tragada de plata ese programa. Los maestros les hacen sentar a sus alumnos en un espacio de lectura y les ponen un libro en la mano, les sacan la foto y luego cada uno a su aula. Eso no es un espacio de lectura. Se deberÃa, por ejemplo, aprovechar la formación en la entrada y que los alumnos lean algún texto, ahà se entenderÃa. Pero hoy es una tragada de plata", insistió un docente de la capital.
El diputado Guillermo RodrÃguez anunció que "bombardeará" al Ministerio de Educación con pedidos de informes sobre el proyecto Ñe'ery para que RamÃrez rinda cuentas de los fondos invertidos. "Es el responsable de que cada guaranà de esta iniciativa sea invertido de forma Ãntegra y transparente. Estamos hablando de un programa que nació en agosto del año pasado y no es poca plata. No hay caso que con la necesidad que tenemos digamos 'no, solo son 12 millones de dólares'. Tiene que haber una rendición y auditoria", señaló.
Con cierto escepticismo, RodrÃguez admitió que la presencia de RamÃrez en la cámara será una "brillante oportunidad" para que pueda demostrar cómo se están haciendo las cosas en Educación y echar por tierra las denuncias de que el proyecto constituye un nuevo agujero de desvÃo de fondos y estafa que nunca llegó a las escuelas.
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