A dos días de conocerse la imputación contra Mario Abdo Benítez y ocho de sus exfuncionarios, el exmandatario recibió en su casa a dirigentes de Fuerza Republicana, con quienes compartió un almuerzo y se sacó una foto que sus aliados subieron a las redes. El encuentro se da en medio de las denuncias de montaje de la causa por la supuesta filtración de información sensible para perjudicar a Horacio Cartes.

En la foto se lo ve a Marito rodeado por su exvicepresidente, Hugo Velázquez, sus exministros Arnoldo Wiens (Obras Públicas), Luis Castiglioni (Exteriores e Industria y Comercio), los diputados Daniel Centurión y Mauricio Espínola -quien fuera su secretario, también imputado en la misma causa- y el senador Mario Varela, entre otros referentes del abdismo.

Se trata de la primera aparición de Abdo tras la imputación de los fiscales Aldo Cantero y Giovanni Grisetti por presuntamente haber entregado información de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad) sobre los negocios de Cartes al Ministerio Público de Panamá y a medios de comunicación. Sin embargo, el expresidente sigue sin hacer declaraciones públicas desde que dejó el cargo en agosto pasado.

Abdo había dejado en claro a su entorno que no hablaría con los medios hasta cumplirse el primer año de gobierno de Santiago Peña, pero sus allegados buscan que rompa el silencio y plante cara a lo que consideran una embestida del cartismo. El martes, el expresidente recibió el apoyo de Mauricio Macri y otros exmandatarios latinoamericanos que mostraron su preocupación por el estado de la democracia en Paraguay.

En la última semana se debatió la eventual expulsión de Marito de la ANR, que finalmente no se trató en la convención partidaria del sábado

Pero el almuerzo y la foto en la casa de Abdo son un mensaje en sí mismo. En la última semana se debatió la eventual expulsión de Marito de la ANR, que finalmente no se trató en la convención partidaria del sábado. Aunque Honor Colorado quiso vender la imagen de un partido unido, la disidencia colorada se resiste a ser cooptada por el cartismo. 

Los dirigentes del abdismo enmarcan la imputación en una estrategia de persecución política no solo contra el exmandatario, sino contra los colorados no alineados con la línea oficialista de la ANR. Por eso le piden a Abdo que deje el ostracismo y vuelva al centro de la escena como un liderazgo alternativo al de Cartes.