
Mario Abdo BenÃtez ultima los detalles para el inicio de una gira para acercarse a las bases coloradas en diferentes departamentos de la mano de sus diputados y exministros de su gobierno que siguen leales su lÃnea de oposición interna al cartismo. Los recorridos a nivel nacional, previstos para este mes, iniciarÃan en Asunción, Central, Caazapá, Caaguazú, Cordillera, Alto Paraná y Guairá.
Según pudo saber LPO, el expresidente incrementó los encuentros con dirigentes en su oficina privada de una de sus empresas en el centro de la capital. Su entorno admite que las últimas investigaciones y denuncias buscan frenar el retorno de Abdo a la escena polÃtica y evitar que lidere a la disidencia, repitiendo el fenómeno de 2017, cuando venció a Santiago Peña en las internas para las presidenciales del año siguiente.
Abdo y Velázquez negocian con dirigentes renegados del cartismo para rearmar a la disidencia
Cada departamento sigue manteniendo los liderazgos naturales que en su momento le dieron la victoria a Marito y hoy son los mismos que preparan el camino para esta primera gira. En Cordillera, el diputado Roberto González encabeza los equipos luego de la fuga del gobernador Denis Lichi y su par Hugo Meza, que decidieron dejarse llevar por la corriente y pegar el salto a Honor Colorado. En Caazapá sobresale el equipo del diputado Juanchi Maciel, uno de los referentes mejor posicionados de Fuerza Republicana.
El departamento de Alto Paraná es controlado por el diputado Luis "Tiki" Gonzalez Vaesken, quien se encargó de recibir a toda la dirigencia cartista molesta con la posible candidatura de Sandra McLeod a la intendencia de Ciudad del Este y el retorno del Clan ZacarÃas. En otros territorios la dinámica es más compleja.
El liderazgo en Central y Asunción está dividido entre los diputados Mauricio EspÃnola y Daniel Centurión. En Guairá existe un predominio del equipo del exsenador Rodolfo Friedman, con el que Abdo está conversando para que se defina en qué bando se quedará. El exmandatario no quiere deserciones a mitad de la campaña y necesita garantizar que cuenta con una red de leales.
A esta lista se suma Caaguazú, donde el exministro de la Juventud, Édgar Colman, y el exdiputado Hugo Ibarra empiezan a mostrar músculo ante los primeros roces entre los recién conversos al cartismo: el senador Mario Varela, el diputado Édgar Olmedo y el gobernador Marcelo Soto, con la asignación de Silvio "Beto" Ovelar como el "cacique" del departamento. La decisión de dividir el departamento en dos regiones para la administración de Educación provocó enojo, que ya está siendo aprovechado por el abdismo.
Ningún ministro puede impulsar obras o direccionar fondos a alguna institución sin el consentimiento del "cacique" departamental, que por orden del comando polÃtico de Honor Colorado recae sobre los senadores de cada territorio. Esto forma parte de la estrategia cartista de absorber la mayor cantidad de gobernadores, diputados y senadores de la disidencia colorada y la oposición para seguir ensanchando la mayorÃa en las dos cámaras y concentrar el poder de decisión en los departamentos.
Sin embargo, la cúpula cartista dejó a un lado a las bases y a las estructuras que van acercándose de a poco a las filas de Fuerza Republicana, en una gesto de venganza contra Horacio Cartes por estar cometiendo los mismos errores de 2018, que provocaron la caÃda de su equipo y la victoria de Marito.
Marito reaparece para evitar que el cartismo se lleve a sus dirigentes
"La historia se repite como en 2017 y 2018. Fuerza Republicana se formó de varios movimientos frente a un oficialismo fuerte liderado por Cartes que solo se dedicó a absorber a autoridades. Hoy nuevamente las bases que reniegan se unen a esta oposición que cada vez es más grande. Es decir, donde vayan todos los mariscales y generales no define el voto", dijo a LPO Addis Merlo, dirigente de Caazapá y madre de Juanchi Maciel.
Los convencionales y presidentes de seccionales de Caaguazú y Alto Paraná coincidieron con la lectura de la experimentada dirigente caazapeña y agregaron que "en una jaula no pueden estar dos o tres leones". La metáfora era una clara referencia al nivel de crispación en los dos departamentos, donde además el caudal electoral es alto.
De esta manera, los equipos se preparan para recibir a la principal figura de la disidencia colorada para los próximos dÃas, luego de un prolongado silencio que solo rompió en contadas ocasiones. El fin de las reuniones no es llamar la atención, sino reagrupar a la dirigencia con la sangre en el ojo por el supuesto abandono de Peña y Cartes.
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