La Cámara de Senadores aprobó un proyecto de declaración en el que insta a la Justicia Electoral a suspender la compra de máqui­nas de votación y optar por el alquiler para las elecciones internas y las municipales de 2026. Los legisladores cartistas y sus aliados cuestionan la burocracia del proceso, pero la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) se mantiene en su postura de respetar los plazos.

Si bien desde la cámara alta reconocieron la trayectoria del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), el pedido de cancelar la compra de las máquinas responde a las controversias que ha generado el proceso de adquisición, que incluyó una fuerte disputa entre la institución y Contrataciones Públicas. De hecho, la licitación fue frenada por Agustín Encina en más de una ocasión. 

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El documento aprobado por el oficialismo recomienda al TSJE que "en uso de las facul­tades conferidas por la Ley de Suministro y Contrataciones Públicas, proceda a la apertura de un nuevo llamado por la vía de la excepción, destinado al arrendamiento de máquinas de votación, a fin de garanti­zar la disponibilidad de tec­nología electoral en los plazos requeridos para la organiza­ción de los comicios".

Rafael Filizzola.

Por su parte, el senador opositor Rafael Filizzola apuntó contra Honor Colorado. "El Congreso no debería inmiscuirse en competencias privativas de otro órgano del Estado. Hay varios problemas, uno que se plantea un proyecto tan sensible, como son las elecciones, la legitimidad del voto, de una manera abrupta, sobre tablas y que no se discuta suficientemente y genera suspicacia", dijo.

El Congreso no debería inmiscuirse en competencias privativas de otro órgano del Estado. Hay varios problemas, uno que se plantea un proyecto tan sensible, como son las elecciones, la legitimidad del voto, de una manera abrupta, sobre tablas y que no se discuta suficientemente y genera suspicacia

Por su parte, Encina, director de Contrataciones Públicas, mencionó que había "grupos" -sin dar nombres- que querían volver a las papeletas, para lo cual habría que volver a cambiar la ley, pero que la DNCP no cedería a las "presiones políticas". La institución cumplirá el plazo de 35 días hábiles luego de que todas las partes contesten las protestas presentadas contra la licitación en curso.

Se ve una cantidad de reuniones y posiciones de grupos políticos que no están de acuerdo con la modalidad de compra y que pretenden que se repita el alquiler de las máquinas. El Tribunal Superior de Justicia Electoral decide comprar y no alquilar

"Se ve una cantidad de reuniones y posiciones de grupos políticos que no están de acuerdo con la modalidad de compra y que pretenden que se repita el alquiler de las máquinas. El Tribunal Superior de Justicia Electoral decide comprar y no alquilar. Desde Contrataciones Públicas lo que medimos es si el proceso se hizo en forma o no", sostuvo Encina.

El TSJE advierte que el retraso en la compra de las máquinas de votación pone en riesgo las municipales

La DNCP había rechazado las protestas presentadas en la licitación para la compra de las máquinas y dio luz verde para que TSJE retomara el proceso. En medio de la última suspensión, el cartismo y sus aliados lograron copar la comisión de control de las máquinas de votación en el Senado, pero el apuro parece haber sido en vano hasta el momento.

El objetivo es tener entre 25.000 a 30.000 máquinas para las próximas elecciones, una cantidad suficiente para poder garantizar los comicios sin sobresaltos y previendo la capacitación necesaria para su uso. La inversión estimada de la Justicia Electoral es de unos USD 93 millones.