Apenas un día después del lanzamiento del programa Hambre Cero, un docente de la Escuela Básica 917 San José Obrero de la ciudad de Teniente Manuel Irala Fernández, en Presidente Hayes, denunció que las provisiones enviadas por el Ministerio de Desarrollo Social llegaron en mal estado. Además apuntó que la cantidad de alimentos entregados no coincide con el número de alumnos que tienen. Santiago Peña se enteró del tema y envió un equipo al lugar.

Jover del Puerto es el único docente de la escuela y comentó que cuenta con 37 alumnos matriculados desde el preescolar hasta el noveno grado. Este martes comunicó a varios medios que los alimentos estaban podridos y que ni siquiera el Ministerio de Desarrollo Social les envió todas las provisiones. "En la primera reunión con el MDS salí con mucha esperanza después de que hayan prometido la provisión de heladeras, freezer, mesas, sillas, además de los ingredientes para preparar las comidas", explicó.

El Gobierno lanza Hambre Cero, pero admiten que la mitad de los alumnos deberá comer en sus pupitres

El sábado, la escuela recibió alimentos para 22 estudiantes, con frutas y verduras podridas y cuatro paquetes de carne que habían perdido la cadena de frío. En cuanto a los equipos, el Gobierno envió una cocina de dos hornallas, una garrafa y una heladera en la que no entran todos los alimentos perecederos. Faltaron las mesas y sillas que también fueron adjudicadas a su escuela, por lo que ya se podría hablar de irregularidades.

El presidente Santiago Peña. 

Europa Press

Según Presidencia, Peña ya envió un grupo de funcionarios para que investiguen qué pasó y si se puede solucionar esta misma semana. Días atras en la Junta de Gobierno de la ANR, el ministro Tadeo Rojas había dicho que descubrieron irregularidades en algunas licitaciones otorgadas durante el proceso y que las iba a revisar, pero la proveedora de los alimentos en Irala Fernández al parecer eludió los controles que dispuso el MDS.

El lunes comenzó a distribuirse oficialmente los alimentos en el marco de Hambre Cero, que cuenta con un fondo de USD 500 millones para alimentar a los alumnos del sistema público de educación. El programa tiene como fin eliminar la deserción escolar y mejorar la calidad del aprendizaje y es una de las políticas sociales más promocionadas por el Ejecutivo central.

El Gobierno envió una cocina de dos hornallas, una garrafa y una heladera en la que no entran todos los alimentos perecederos. Faltaron las mesas y sillas que también fueron adjudicadas a su escuela, por lo que ya se podría hablar de irregularidades

En esta primera tanda se distribuyeron alimentos en 90 distritos del país, mientras que otros 173 tendrán que esperar hasta el próximo año, informó el propio Gobierno. Otra denuncia también fue hecha por la organización Tierraviva, que según testimonios de líderes de diferentes comunidades indígenas de Presidente Hayes confirman que los víveres entregados por el programa llegaron en pésimo estado y son insuficientes.

Los ministros Tadeo Rojas, Luis Ramírez y María Teresa Barán. 

Niño Gómez, de la comunidad Monte Alto, señaló que los productos estaban descompuestos y "parecían sacados de la basura". En la escuela San Isidro Labrador de Areguá, Gabriela Caballero, una madre, indicó que la distribución de los alimentos también fue desorganizada, dejando en evidencia que el Gobierno no previó los aspectos logísticos del programa. Aparte de que la porción de los platos no dejaron satisfechos ni siquiera a los niños más pequeños.

El revés a tan solo un día de haber echado a andar el programa molestó al presidente. Tras publicarse las primeras denuncias, el MDS pidió constatar el estado en que llegan los alimentos a las escuelas y señalar cualquier irregularidad.