Este miércoles se conoció oficialmente la decisión de la administración Biden de nominar a Gabriel Escobar como nuevo embajador de los Estados Unidos en Paraguay, en un proceso habitual de rotación de los encargados de las misiones diplomáticas del Departamento de Estado.
De sortear el proceso para confirmar el nombramiento, que incluye el visto bueno del Senado estadounidense, Escobar, quien hasta ahora se desempeñaba como secretario adjunto en la Oficina de Asuntos Europeos y Euroasiáticos del Departamento de Estado, reemplazarÃa a Marc Ostfield, en el paÃs desde marzo de 2022.
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La nominación de Escobar es solo el inicio de un complejo proceso que incluye varias fases: una audiencia con la comisión de Relaciones Exteriores del Senado y una votación de confirmación para la que no hay plazo establecido, sobre todo en un periodo electoral como el que atraviesa Estados Unidos. Faltan apenas poco más de cuatro meses para que Kamala Harris y Donald Trump se midan para la Casa Blanca.
Entre los antecedentes de Escobar figura el de subsecretario Asistente en los Balcanes Occidentales, de donde no salió en los mejores términos. Según publicaciones de marzo de este año, un medio kosovar reveló supuestas conexiones financieras entre su familia y organismos del gobierno serbio que pusieron en duda su integridad diplomática y su compromiso de neutralidad en la delicada relación de Serbia y Kosovo, crucial para la paz en esa región marcada por conflictos étnicos y la fragilidad polÃtica. Estados Unidos lo negó y las sospechas recayeron en la lÃnea del medio, en sintonÃa con la del gobierno de Kosovo.
Desde su llegada a Asunción, Ostfield ha tenido una serie de confrontaciones con el cartismo, sobre todo desde julio de 2022, cuando dio a conocer la declaración de "significativamente corrupto" que habÃa establecido Biden sobre el expresidente Horacio Cartes, actual titular de la ANR.
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Entre esos dos eventos, en el mes de mayo, se produjo el magnicidio de Marcelo Pecci, considerado por muchos como un colaborador fundamental para la polÃtica anti drogas de Estados Unidos que, en un hecho sin precedentes, ofreció una recompensa de USD 5 millones para quien ofrezca información contrastable sobre los autores morales del crimen.
El cambio de embajador agrega un nuevo condimento a la relaciones de por sà complejas entre el oficialismo y Estados Unidos. El cartismo, que no esconde sus diferencias con Ostfield, mira con buenos ojos la posibilidad de un cambio de interlocutor y de un "nuevo comienzo" en vÃnculo bilateral, en palabras de Gustavo Leite, un senador muy cercano al lÃder de los colorados y presidente de la comisión de Relaciones Exteriores de la cámara alta.
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El senador dijo a LPO que si bien era potestad de cada gobierno la designación de sus embajadores, consideraba que Ostfield "le hizo mucho daño a la relación entre Estados Unidos y Paraguay porque violó la convención de Viena y porque tuvo injerencia directa en la polÃtica paraguaya". Es una alusión a la declaración contra Cartes, meses antes de las elecciones internas de su partido. "Él hizo todo lo posible para que el Partido Colorado caiga y no cayó", apuntó.
El legislador dijo que un nuevo representante diplomático dará un aire a la relación, a lo que suman la presencia en Washington, donde conversan frecuentemente con representantes y senadores de los dos partidos.
El cartismo tampoco esconde sus expectativas con respecto al cambio de gobierno en los Estados Unidos, sobre todo tras la confirmación de la salida de Biden de la carrera por la Casa Blanca para un nuevo periodo. Si bien todavÃa el camino es largo, tampoco es un secreto la simpatÃa del cartismo y sobre todo de sus voceros hacia la candidatura de Donald Trump, que ya cuenta con la nominación del Partido Republicano.
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Detrás de esa evidente cercanÃa, que tiene una afinidad ideológica marcada, asoma una salida que, aunque no es muy alta, existe: con el cambio en la Casa Blanca también cambien las condiciones en torno a las sanciones, consideradas por el cartismo como "polÃticas", en contra de Cartes.
En ese sentido, Leite se muestra cauto. "Es muy pronto (para tener expectativas), pero sà es muy claro que el lÃder de nuestro movimiento, presidente del partido de Gobierno y expresidente de la República fue sancionado sin explicaciones, sin pruebas y sin derecho a la defensa", concluyó.
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