No hay ningún cambio en el escenario del mercado de la carne paraguaya, aunque Taiwán haya mejorado sus importaciones: es el diagnóstico de Pedro Galli Romañach, presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP).

Esta mejora es fruto de las presiones del sector cárnico, que se siente preso de las relaciones diplomáticas de 66 años que los distintos gobiernos del Partido Colorado decidieron mantener con la isla, y que Santiago Peña reafirmó al asumir la presidencia.

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Al menos en los próximos cinco años será imposible vender carne a China, apuntó resignado Galli a LPO al analizar la coyuntura que mantiene atrapado a Paraguay en este conflicto, siendo el único país aliado de Taiwán en Sudamérica, de un total de 13 en todo el mundo. Resalta que el cálculo hasta el año pasado era de USD 800 millones en pérdida por no comerciar con Beijing.

"Lo próximo que me queda es salir a correr desnudo por la calle Palma en señal de protesta, o durante el clásico en la cancha", ironizó Galli. La situación no es buena para el mercado de la carne por los cambios internacionales, sobre todo por las retracciones en el escenario chino, estimó el ganadero.

Peña con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen.

Agencia IP

"Lo que reclamamos es que no estando en China, nos ponen en una situación más incómoda, porque los otros países exportan por lo menos la mitad para arriba de su producción a China. Igualmente, ahora estamos con los precios más bajos que hace muchísimo tiempo. Te diría que casi como en la época de la pandemia, considerando los costos mucho más elevados que tenemos ahora", describió el presidente de la ARP.

El otro factor de desventaja en este momento fue el episodio que se vivió con las exportaciones en Chile. Se quedaron varados en la nieve centenares de camiones sin poder llegar, siendo septiembre el mes de mayor compra de carne debido a las fiestas patrias en el país trasandino.

 Si el gobierno tiene una posición de acuerdo con los intereses que ellos consideran, tal vez, superiores, la situación no va a cambiar

Comerciar con China es una gran ventaja para los productores de carne, pero el sector considera descartada una negociación, al menos con este rubro, porque el país asiático exige como condición excluyente mantener relaciones solo con gobiernos que no reconocen a Taiwán como nación independiente.

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"Somos realistas. Si el gobierno tiene una posición de acuerdo con los intereses que ellos consideran, tal vez, superiores, la situación no va a cambiar, por más que busquemos, porque si no hay relacionamiento diplomático, no va a haber negociaciones para una apertura de mercado", admitió Galli.

Carlos Fernández Valdovinos, ministro de Economía.

Para vender carne se necesita de una intervención de los organismos oficiales, no así otros productos. De hecho, Carlos Fernández Valdovinos, ministro de Economía, se mostró abierto a abrirse a China y hasta llamó a empresarios interesados a invertir en Paraguay, contrariamente al discurso de Peña en New York, cerrado a su relación con Taiwán, durante su mensaje a la Asamblea de las Naciones Unidas.

Valdovinos fue claro al diferenciar entre el vínculo político y el económico que Paraguay puede tener con China y con Taiwán. En paralelo, Paraguay espera la decisión de Estados Unidos de abrir mercado de la carne en ese país. El proceso por parte del gobierno fue completado, por lo que todo está en la cancha de Washington.

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En 2022, desde enero hasta agosto, Paraguay exportó más de 234.408 toneladas de carne bovina. Esto representó un valor económico de USD 1.230.224.134. Se vendió a Rusia, Brasil y Chile, entre los mercados más importantes.