Sin dudas, la denominada "ideologÃa de género" fue uno de los pilares del cartismo en su campaña electoral, instalado como uno de los principales desafÃos para el paÃs por la supuesta "colonización ideológica", cuyo principal representante, según el oficialismo, es la Unión Europea.
El cartismo personificó en Bruselas y en todas sus iniciativas -como el convenio educativo cuestionado en el Congreso-, los temores de un posible adoctrinamiento ideológico que tendrÃa a los niños como principal blanco.
Tras semanas de mucha insistencia sobre el punto, la cuestión de la "ideologÃa de género" se fue apagando por la decisión del gobierno de Santiago Peña de frenar la iniciativa de sus parlamentarios de derogar el convenio con financiamiento de la UE al Ministerio de Educación, que fue interpretado como una "reculada" del cartismo sobre el asunto.
Esta semana, el tema volvió a reflotarse. El primero en hablar del tema, aunque de manera más solapada, fue el propio Santiago Peña, que en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas hizo alusión al multilateralismo y la "imposición de tendencias y enfoques culturales o ideológicos", que muchas veces son "contrarios a los valores nacionales y que erosionan la confianza y la voluntad de cooperación". La alusión era bastante clara.
El segundo en abordar el tema fue el presidente del Congreso, Beto Ovelar, al ser preguntado por la firma de un convenio con la Universidad de Bolonia que tendrÃa un acto enmarcado, de acuerdo a los sectores ultras, en la "ideologÃa de género".
Ovelar contestó que aunque está en contra de la "ideologÃa de género", no puede censurar el debate. "Soy un heterosexual definido, nadie puede dudar de eso. Pero le respeto a la gente que tiene otras opciones", apuntó.
La tercera arremetida sobre el asunto la dio Lizarella Valiente, cuya plataforma electoral estuvo sustentada en este discurso antiderechos. La senadora sostuvo que el convenio con la Universidad de Bolonia, que tuvo como tema "MinorÃas, Género y diversidad", pretende alentar una supuesta "hormonización" de menores de edad.
En su discurso, la senadora cometió un error al intentar expresar una frase el latÃn: "desde sécula seculom" (sic) -equivocando la pronunciación y la interpretación de la locución latina "per saecula saeculorum"- "existieron homosexuales", dijo Valiente, que cuestionó si corresponde hablarle a un niño de la sexualidad desde "el hedonismo".
Valiente es, justamente, la promotora de un proyecto de ley que pretende castigar penal y administrativamente la enseñanza de la "ideologÃa de género", cuestionado por varias organizaciones de derechos humanos que aseguran que la intención del proyecto es la de censurar una educación con perspectiva de género, una obligación asumida por el Estado paraguayo a través de convenios internacionales.
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