
Conscientes de su desventaja ante la fuga de votos por la división de la bancada en los últimos meses, Fuerza Republicana va bajando el techo de sus pretensiones y ya no buscarán disputarle la titularidad de la cámara a Raúl Latorre. El abdismo le hizo saber a Honor Colorado y al presidente Santiago Peña que ahora irán por un lugar en la mesa directiva.
Liderados por Daniel Centurión, los abdistas van trabajando en el terreno de las negociaciones con Latorre y barajan la posibilidad de aceptar la vicepresidencia primera de Diputados como una suerte de "premio consuelo" que, al mismo tiempo, evitaría una nueva división dentro de la ANR, que el próximo 9 de marzo celebra su convención.
Peña se encuentra de una gira oficial por España y a su vuelta deberá analizar si pisa su palabra de ceder la presidencia de la cámara baja a los abdistas y les entrega a cambio el puesto de Carlos Arrechea.
Por su parte, Latorre tiene garantizados hasta ahora un total de 51 votos, gracias al respaldo de la "bancada B" de la ANR, encabezada por el diputado Hugo Meza, que también está interesado en conseguir una silla en la mesa directiva. Ese escenario es más probable, aunque implicase la salida de Arrechea, un exabdista.
"Fuerza Republicana sigue más allá de la fuga de votos. No sé si vamos a exigir porque no tenemos la fuerza suficiente, pero vamos a procurar que se cumpla la palabra empeñada. La vicepresidencia sería un premio consuelo. Como mínimo eso corresponde", deslizó Roberto González, diputado de Fuerza Republicana.
A la vez, los abdistas condicionan los compromisos asumidos a una eventual partición dentro del Partido Colorado, a solo días de una convención donde la posibilidad de convocar a una sesión extraordinaria para meter la figura de la reelección en la Constitución es factible.
El diputado abdista Jorge Ávalos Mariño afirmó que el cartismo tiene una mayoría sólida para lograr la reelección de Latorre, pero que eso no evitará que su movimiento agote las charlas para ocupar espacio de poder en el colegiado. Los partidos de la oposición solo lograron sumar 37 votos, una cantidad insuficiente para enfrentar a la "aplanadora" cartista.
Sin los votos suficientes de las fuerzas opositoras, el abdismo tuvo que resignar sus objetivos maximalistas y aceptar que no es el momento para desafiar al cartismo. Pero Honor Colorado tiene que cumplir con sus aliados de la "bancada B" y los liberales alejados de Hugo Fleitas, por lo que cambiar la composición de la mesa llevaría a un acuerdo mayor con Fuerza Republicana, que hasta ahora ostentó una capacidad autónoma en las votaciones.
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