A medida que se acercan las elecciones en Federación Agraria (FAA) el clima político se calienta cada vez más. Ocurre que en dicho acto eleccionario –a realizarse el 27 y 28 de septiembre en Rosario- se renovarán los principales cargos directivos en la entidad.

En este contexto, en los últimos días comenzaron a correr todo tipo de rumores y versiones acerca de eventuales irregularidades en los comicios en los que el actual presidente, Eduardo Buzzi, buscará extender su mandato por un año más.

La batalla para la tropa buzzista no será fácil: en frente deberá competir con nada menos que su eterno archi-rival en la entidad centenaria, Alfredo de Angeli, que, si bien aún no está oficializado, seguramente, será la cabeza visible del inmenso arco opositor.

Para lograr destronar a Buzzi –que preside FAA desde el año 2000- los integrantes de las tres líneas opositoras (“Grito de Alcorta”, “Línea Federal” y “La Netri”) vienen manteniendo una serie de reuniones para consensuar la estrategia electoral.

En estos encuentros se acordó principalmente la manera de impedir irregularidades ejerciendo un fuerte control fiscalizador en todas las filiales que deberán elegir a sus directores, para que éstos, luego, hagan lo propio con el cargo de presidente.

“Vamos a trabajar a favor de la transparencia y del cuidado de una institución centenaria que no merece este tipo de manejos fraudulentos; no permitiremos que ocurra lo mismo que el año pasado”, señaló a LPO el dirigente de la Línea Federal, Ricardo Grazia.

En el arco opositor se encolumnan viejos aliados y hasta en algunos casos “ex amigos” de Buzzi, disconformes con el modo de conducción personalista, como el experimentado Pedro Peretti, el combativo Silvio Corti y el joven Esteban Motta.

También hay hombres de la talla de Juan Manuel Rossi y el cordobés Carlos Bergia, entre otros, que se alejaron del buzzismo luego de denunciar manejos poco claros en la administración de los fondos de la entidad federada.

Así las cosas, según pudo saber este medio, los dirigentes de la oposición tampoco descartan solicitar la presencia de una entidad veedora que supervise el proceso electoral para garantizar la transparencia de los comicios.

La FAA posee un consejo directivo central con 27 directores, de los cuales 16 representan al interior del país, 8 integran las listas oficiales y 3 representan a la Juventud (todos los años se renueva un tercio de cada una de estas tres patas).

Las irregularidades de 2011

“Si las elecciones fueran transparentes, Buzzi no llega al 30 por ciento”, es la frase más popular que se escucha en las asambleas opositoras a la actual conducción buzzista integrada por Julio Currás, Omar Príncipe y Guillermo Giannasi, principalmente.

Estas declaraciones vienen al caso porque en la última elección interna de FAA en la cual Buzzi se consagró nuevamente ganador se registraron todo tipo irregularidades, denunciadas luego por la oposición, pero nunca investigadas a fondo.

En dichas elecciones el buzzismo consiguió una serie de sorpresivos acuerdos con sectores opositores a los que, apenas unos días antes del acto eleccionario, muchos apostaban que podían darle más de un dolor de cabeza.

De esta manera, Evangelina Codoni, una activa militante de Chacareros Federados –una rama que se oponía a la gestión de Buzzi- se convirtió en secretaria de la Juventud, al tiempo que Juan Carlos Herrero pasó a ocupar el cargo de secretario de Finanzas.
Además, al momento de la votación se presentaron unos 450 delegados regionales para elegir los cargos directivos, cuando apenas unos días antes de las elecciones había habilitados para votar solamente 350 representantes.

De esta manera, y de cara a las elecciones que se vienen, en los últimos días salió a la luz que la FAA pagó sellos por más de $ 12.000 a entidades y asociaciones creadas a último momento que permitieron que Buzzi sea electo una vez más.

“No vamos a permitir que esto vuelva a ocurrir”, advirtió Silvio Corti, al tiempo que agregó que “creemos que si las elecciones son realmente transparentes, como debieran ser, Buzzi no llega al 30 por ciento de los votos”.