Daniel Scioli medita por estas horas una profunda reestructuración de su gobierno. Los cambios que están sobre la mesa de su despacho de La Plata se analizan con un ojo puesto en la Casa Rosada, en un delicado juego de equilibrios y tensiones, que hasta ahora Scioli vino surfeando con una habilidad que debería motivar alguna autocrítica en aquellos que se apresuran a subestimarlo.

El área que concentra las discusiones es obviamente la de Seguridad, siempre en el ojo de la tormenta. En principio se estudia volver a desdoblar la cartera unificada cuando el ministro de Justicia, Ricardo Casal, absorbió Seguridad. El cambio respondería a un pedido de la Casa Rosada que en esta área quiere poner en línea a la provincia con las estructuras de la Nación.

Se da aquí la pulseada más interesante. La ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré, quisiera que Casal quede como ministro de Justicia y Scioli designe en Seguridad alguna persona afín a su visión, pero el gobernador preferiría hacer exactamente lo contrario: mantener a Casal en Seguridad y nombrar a alguna otra persona en Justicia.

Lo que si estaría decidido –como anticipó LPO- es después de octubre producir un recambio en la actual cúpula policial que encabezan Juan Carlos Paggi y Hugo Matzkin. Sin embargo no se trataría de un cambio traumático, ya que Scioli tiene una excelente relación con Paggi que podría quedar como “hombre de consulta”. Como nuevo jefe de policía se menciona al superintendente de la zona sur, comisario mayor Osvaldo Castelli.

Otro de los cambios en análisis es la unificación de los ministerios de Producción y Economía, que quedarían bajo la órbita del titular de este último, el carismático Alejandro Arlía. Scioli se inclinaría así por no nombrar un reemplazante de Martín Ferré –actual titular de Producción-, que asumirá como diputado provincial y suena para jefe de bloque o vicepresidente de la cámara baja provincial.
La otra finta interesante se está desplegando en torno al estratégico Ministerio de Desarrollo Social que deja Baldomero “Cacho” Alvarez quien asumirá como senador provincial. Alicia Kirchner le hizo saber a Scioli que le interesaba ubicar en esa posición a alguien de su equipo. Concretamente se mencionó a su viceministro Carlos Castagnetto o al hombre fuerte de su cartera, el secretario de Gestión, Sergio Berni, quien además seguramente resulte electo senador provincial por la segunda sección.

Pícaro, Scioli contrapropuso a su actual ministra de Infraestructura, Cristina Alvarez Rodríguez, que tiene excelentes relaciones con la Casa Rosada. De hecho su marido, Miguel Cubero, es el jefe de Gabinete de Amado Boudou. Uno de los motivos que explica la excelente relación del gobernador con el ministro de Economía, un eje que inquieta al futuro vice, Gabriel Mariotto.

Como sea, Cristina Alvarez Rodríguez si se confirma esta información, sería una de las pocas funcionarias del gabinete de Scioli que integra listas legislativas –es candidata a diputada nacional-, que no asumiría su banca.

Por último, en la gobernación también analizan cambios en el área de Comunicación. Está dando vueltas la idea de armar una super Secretaria de Medios potenciando a la actual estructura con la incorporación de radio Provincia y el flamante canal 29 de la gobernación.

Para esta área, si es que se crea, se menciona a Gustavo Reale, un asesor de Scioli que lo viene acompañando desde sus épocas de vicepresidente en el Senado; y a Juan Courel. Este último es actualmente el jefe de asesores de Scioli y tiene una amplia experiencia en medios. Además es candidato número diez en la lista de diputados provinciales de la cuarta sección y pertenece al círculo histórico de Scioli que lidera el jefe de Gabinete, Alberto Pérez.