El resultado de las elecciones primarias significó un duro golpe para las intenciones presidenciales de Elisa Carrió, pero sobre todo puso en jaque la unidad de su Coalición Cívica. Desde ese día, son muchos los dirigentes que -frente a la falta de conducción y liderazgo en su fuerza política- comenzaron a analizar posibles cambios de rumbo.
Conscientes de esta situación, la Mesa Nacional del PRO se propuso desplegar una estrategia de seducción a esos dirigentes "desamparados" para convocar a trabajar con el macrismo. "Todavía no hay acuerdos formales, pero la idea es sumar a todos los que quedaron heridos en la Coalición", reveló a La Política Online uno de los principales operadores del macrismo.
En principio, el plan es avanzar en negociaciones informales con sus diputados hasta que pasen las elecciones de octubre. Recién allí se conformarían las nuevas alianzas, aunque tampoco se descuenta que haya dirigentes que quieran permanecer en la Coalición, pero trabajando coordinadamente con el bloque del PRO.
"El principal objetivo está en el Congreso de la Nación, pero también queremos desplegar esta misma estrategia en legislaturas provinciales, intendencias y los concejos deliberantes. Queremos ampliar nuestra base dirigencial en todo el país para las presidenciales del 2015", anticipó la misma fuente.
Patricia Bullrich, uno de los alfiles de Carrió en los últimos años, ya mostró algunos signos de acercamiento con el bloque macrista en el Congreso. No fue llamativo que compartiera -junto a la radical Giudici- una cena con Gabriela Michetti, Federico Pinedo y Paula Bertol, y hayan publicado las imágenes del encuentro.
Un día después de esa reunión amistosa, Macri brindó una conferencia de prensa para analizar los resultados de las primarias, y cuando se le preguntó a qué candidato presidencial votaría en octubre contestó: "Vamos a votar primero por Pinedo, porque creemos que no sólo él sino varios diputados son fundamentales para que exista un equilibrio institucional. Es muy importante que apoyemos la lista del PRO y que renueven sus bancas diputados valiosos, como por ejemplo Patricia Bullrich".
La relación de la ex ministra de Trabajo con el partido amarillo siempre fue buena. Juan Pablo Arenaza -su hombre en la legislatura porteña- acompañó al bloque del PRO en todas las votaciones trascendentes, al punto que generó más de un roce con el jefe del bloque de la Coalición, el "lilito" Fernando Sánchez.
En los últimos días también Fernando Iglesias se sumó a la legión de diputados nacionales que podrían pasar al PRO. Pero su situación es menos tentadora para el macrismo, porque con el magro resultado de las primarias, no está garantizado su ingreso a la cámara baja.
