El gobernador Daniel Scioli encabezará a fin de mes una misión comercial a Israel para abrir mercados a los productos bonaerenses y avanzará en los detalles para la construcción de una planta potabilizadora de agua con una inversión de 150 millones de dólares.

La iniciativa es impulsada desde hace dos años por la empresa Mekorot Water Company, firma estatal de agua de Israel, y, según las autoridades, servirá para mejorar el servicio de agua potable en el Gran La Plata y una parte del sur del conurbano, donde habitan más de dos millones de personas, revela una nota de La Nación.

El emprendimiento, que reemplazaría a la actual planta Donato Gerardi, construida hace más de 50 años, mejorará el caudal y la calidad del agua y reducirá en un 56 por ciento los costos de operación, se aseguró desde el gobierno provincial.

El proyecto se inscribe en la ley provincial de iniciativa privada e incluye el financiamiento, la construcción y posterior operación de la planta hasta el momento del repago total de la obra, estipulada en 15 años, y que implicará un aumento tarifario de no menos del 33% para los usuarios de la zona.

En tal sentido, se precisó que se incorporará a la tarifa de Aguas de Buenos Aires (ABSA) un "cargo de obra" adicional, que, en principio, deberán pagar unos 255.000 usuarios de La Plata, Berisso y Ensenada. Lo recaudado será depositado en un fideicomiso que se constituirá en el Banco Provincia. No obstante, no se descarta que se pueda aplicar, en principio, un subsidio del Estado para amortiguar el impacto.

Será la primera experiencia de iniciativa privada para la realización de obra pública en la provincia. "La propuesta tiene la modalidad de que quienes presentan la iniciativa proponen hacerse cargo del desarrollo del proyecto, la ejecución con contratistas locales, el financiamiento y el gerenciamiento de la nueva planta", explicaron fuentes de ABSA.

Mekorot constituyó un consorcio con la constructora Ashtrom Internacional Ltd. y la cooperativa 5 de Septiembre -constituida por trabajadores del Sindicato de Obras Sanitarias de Buenos Aires (Sosba)-, que recibirán la colaboración de empresas locales. La obra, que demandará unos 24 meses de construcción, llevará agua potable a unos 720.000 usuarios, que representan a más de dos millones de personas. En el futuro, se prevé extender el servicio, a través de la extracción de agua del Río de La Plata y su combinación con el trabajo de otras plantas del Gran Buenos Aires.

"Uno de nuestros grandes objetivos es promover inversiones en la provincia para aumentar la capacidad productiva de bienes y servicios", dijo ayer Scioli, al confirmar su viaje. El ministro de la Producción, Martín Ferré, informó que, durante la visita, el gobernador se reunirá con autoridades del área de infraestructura para conocer el trabajo, para combatir la desertificación, que la provincia quiere replicar en el sudoeste bonaerense, además de analizar la experiencia de tratamiento de residuos.