Tras las versiones cruzadas por un supuesto llamado al 101 avisando de un accidente en la ruta el mismo día que desapareció la familia Pomar, allanan la departamental de Pergamino.

Una nueva polémica por la manera en que se manejó el caso Pomar esta mañana cuando el intendente de Pergamino Héctor "Cachi" Gutiérrez reveló que la noche del 14 de noviembre "hubo un llamado telefónico" al 101 alertando sobre el accidente de tránsito de la familia Pomar, que falleció al despistar en la ruta 31, y atribuyó esa revelación a "una fuente de la propia policía".

"Se desechó esa información y ninguna de esas pistas fue considerada; se investigó la hipótesis del autosecuestro", agregó el jefe comunal.

Al instante, la fiscal de la causa, Karina Pollice explicó que la primera hipótesis que se investigó fue la del accidente automovilístico, pero que la dejaron de lado al no tener datos que reforzaran la teoría en hospitales y en distintos accesos en las rutas por las que podría trasladarse la familia con destino a Pergamino.

Respecto a los dichos del intendente de esa ciudad bonaerense, Héctor Gutiérrez, explicó que "no hubo ninguna llamada" y detalló un episodio que vivió el padre de Luis Pomar cuando radicó la denuncia en una dependencia de la Policía Federal.

“Un cabo se comunicó con cada una de las oficinas de las dependencias policiales que existen desde José Mármol hasta Pergamino por las rutas 7 y 8. En un momento le comentan un accidente en San Andrés de Giles y cuando el oficial pregunta por el Fiat Duna Weekend rojo, en el que se trasladaban, le dijeron que no coincidía con el vehículo siniestrado", remarcó en conferencia de prensa.

Pollice reiteró que se realizaron "tres rastrillajes aéreos" en ese tramo de la Ruta 31 y precisó que existe constancia de los mismos, por lo que al conocerse el lamentable final de los Pomar inició una investigación interna.

Además, aclaró que todos los días había operativos para encontrar a los cuatro integrantes de la familia y que ella recibía un "reporte diario".

Por su parte, el abogado de la familia Pomar, Carlos Ferreyra , precisó que el 14 de noviembre hubo un llamado alertando sobre un accidente de tránsito, pero fue desechado porque no coincidía el automóvil que se había encontrado.

Ferreyra explicó en declaraciones a la prensa que el dato había surgido cuando el padre de Luis Pomar había ido a una dependencia de la Policía Federal a radicar la denuncia por la desaparición de su hijo, su nuera Gabriela Viagrán y sus nietas María del Pilar y Candelaria.

Pese a ello, oficiales de la Policía Bonaerense realizan un procedimiento en la sede departamental de Pergamino para rastrear la supuesta comunicación telefónica.