“Aunque ganemos, la tensión con Kirchner va a seguir. Van a jugar a quitarle legitimidad al triunfo denunciando un supuesto fraude. Van a parecer testimonios de gente, boletas en lugares sospechosos y toda clase de cosas”, anticipa esta noche a La Política Online una fuente del oficialismo, que resignada agregaba: “esto no se termina el 28 de junio”.

Tan convencidos están en el kirchnerismo de este escenario, que esta noche el centro porteño apareció tapizado de afiches que reflejan a la perfección el eje que Néstor Kirchner imagina a derrotar. Esto es una supuesta alianza entre el grupo Clarín y su rival Francisco de Narváez.

“Todo negativo-Todo Narváez”, dicen los afiches que reinciden en la pegatina de carteles contra el canal de noticias de Clarín, que inundó la Ciudad durante los momentos más álgidos de la pelea del gobierno con el campo.

Frente a este escenario, grupos kirchneristas, que hoy confirmaron a La Política Online que el 28 a la noche marcharán a la Plaza de Mayo -acaso con la idea de desalentar posibles cacerolazos ante eventuales denuncias de fraude-, no descartan sumar en su raid a las propias oficinas de TN en San Juan y 9 de Julio.

Esta pelea, una de las más complejas del panorama político empresario, cruza disntintos intereses, que por ejemplo, incluye la puja por el control de Telecom en la que Clarín se enfrentaría al grupo Werthein aliado a los dueños de Aeropuertos 2000, Eduardo Eurnekian y Ernesto Gutiérrez, que aparecen más cerca del gobierno.

Y también ronda estas complejas situaciones, las versiones de una eventual salida de Marcelo Tinelli de Canal 13, nada menos que para comprar junto a capitales vinculados al kirchnerismo a Telefé.