El conflicto con el campo fue el punto de inflexión para que muchos dirigentes peronistas decidieran abandonar efinitivamente el kirchnerismo. Y las voces que en esos días comenzaron a manifestar sus críticas hacia el Gobierno, hoy se unen para impulsar una agenda legislativa común en el Congreso después de las elcciones de junio. Carlos Reutemann, Jorge Busti y Juan Manuel Schiaretti armaron lo que se denomina tímidamente el "eje peronista-rural".

Según el diario La Nación, en los diálogos informales ya se habla de una agenda legislativa común para después de los comicios de junio con la mirada puesta en 2011. En este esquema se empezó a gestar una alianza entre el peronismo de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos.

Hasta ahora hubo conversaciones reservadas pero cuando comience a tomar color la campaña electoral se verá cristalizado un tácito acuerdo entre el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti; el senador santafecino, Carlos Reutemann, y el eventual candidato a diputado y ex gobernador de Entre Ríos Jorge Busti.

El denominador común de estos tres dirigentes del PJ es su apego por el campo y el perfil antikirchnerista, aunque con diferentes matices. De hecho, en los tres casos estos dirigentes estuvieron alineados con el agro en el conflicto con el Gobierno.

Reutemann y Schiaretti vienen manteniendo encuentros esporádicos y puntos de vista en común para impulsar en el Congreso una agenda legislativa que les permita discutir temas de sus distritos como la coparticipación federal de impuestos y la baja de retenciones al campo.

"Todo indica que después de las elecciones Reutemann va a potenciar al máximo su alianza con el peronismo de Córdoba y de Entre Ríos con vistas al 2011", se sinceró ante el matutino un dirigente muy allegado al ex corredor de Fórmula Uno.
En tanto, Schiaretti dialogó con Busti y con Reutemann en las últimas semanas para acercar posiciones y reforzar el espacio del PJ disidente dentro de la estructura partidaria. Es decir que la intención es fijar una postura ajena a la construcción del peronismo antikirchnerista que lideran en Buenos Aires Felipe Solá y Francisco de Narváez.

El caso de Busti es más complejo. Si bien el ex gobernador entrerriano se mostró distante de Kirchner en los últimos días, también es cierto que ya había sellado un acuerdo electoral con el gobernador Sergio Urribarri, un kirchnerista a ultranza.
La candidatura de Busti se debería definir el próximo sábado en un congreso partidario del PJ, pero hasta ahora hay final abierto. Esto implica, entre otras variantes, que Busti no se presente, lo que significaría la ruptura con Urribarri.

El ex gobernador entrerriano dijo públicamente que "lo que venga después de Kirchner vendrá desde el justicialismo, no por fuera del justicialismo". Según el diario, sus allegados explicaron que Busti buscó criticar de esta manera al polo del PJ disidente que armó De Narváez con Solá.

Aunque al hablar sobre el tono confrontativo del ex presidente, Busti expresó que "nosotros no podemos darnos el lujo de personalidades, de gente de prestigio como el caso de Reutemann, de dejarlas a cualquier suerte". Y añadió: "No intento hablar más con Kirchner, me quedo entre los ríos nomás".