Cuando en diciembre de 2004 el Congreso aprobó la ley 25.983, El entonces ministro del Interior, Aníbal Fernández, la presentaba como una herramienta fuerte para evitar que se manipulen las fechas electorales según los intereses políticos de los que ostentan el poder. Pero poco más de cuatro años después, es el propio kirchnerismo en obviar su propio proyecto y alterar la fecha de los comicios.

Este lunes, como anticipó desde Chubut, Cristina Kirchner enviará al Congreso para modificar por única vez el Código Electoral Nacional. Ese texto deberá modificar el artículo 53º del Código, el cual establece que “la convocatoria a elección de cargos nacionales será hecha por el Poder Ejecutivo nacional”, lo cual se respeta, pero que “la elección se realizará el cuarto domingo de octubre inmediatamente anterior a la finalización de los mandatos”.

El 15 de diciembre de 2004 el Congreso sancionó en forma definitiva la ley 25.983 –se promulgó rápidamente, dos semanas después-. Esta ley modificaba los artículos 53º y 54º del Código Electoral, el cual hasta ahí disponía que el Poder Ejecutivo sólo necesitaba convocar a elecciones con noventa días de anticipación, y nada más.

La iniciativa surgió del entonces titular de la Casa Rosada, Néstor Kirchner, como una vía directa para transparentar los comicios y evitar manejos turbios de las fechas y excesos de quienes tienen el poder de convocar a comicios. Poco más de cuatro años después, el propio kirchnerismo es la primera fuerza nacional en torcer ese designio.

El único artículo que excede este mandato es el 148, el cual regula la elección de presidente y vicepresidente. El mismo especifica para este caso que “la convocatoria deberá hacerse con una anticipación no menor de noventa (90) días y deberá celebrarse dentro de los dos (2) meses anteriores a la conclusión del mandato”.

La Jefa de Estado, en su discurso de hoy, señaló que la iniciativa tiene por objeto superar con la mayor rapidez posible un debate preelectoral "que muchas veces sostiene posiciones personales y partidarias que poco tienen que ver con lo que necesitamos los argentinos" en el marco de la crisis financiera internacional. De hecho, no dudó en torcer una herramienta que ellos mismos habían establecido. Nada mas evidente que un interés netamente personal y electoral.