Cuando Felipe Solá dejó la bancada oficialista y con él se llevó a otros siete diputados se tomó una pequeña venganza personal. Más allá de las complicaciones que generó quitándoles ocho votos, cuatro de esos integraban la Comisión de Agricultura, la cual el gobierno no le permitió integrar luego de también haberle negado la presidencia de la Cámara. Así, les quitó la mayoría en la comisión clave para negociar políticas agropecuarias, el principal escollo del kirchnerismo.

Adriana García, Jorge Montoya, Beatriz Daher y Jorge Thomas son los cuatro ex integrantes del Frente para la Victoria que con el ex gobernador bonaerense crearon el bloque Unión Peronista. Ellos daban una tranquila mayoría al gobierno en la comisión que preside el cordobés Alberto Cantero, quien con la merma oficialista quedó como dueño de una silla caliente.

De los 36 integrantes de la Comisión –una de las más numerosas- los Kirchner contaban con 19 bancas. Ahora, sufren con 15 una pérdida de poder notable que los obliga a hacer algo que el kirchnerismo detesta hacer: sentarse a negociar.

Igualmente, la lectura no se reduce a algo tan simplista como una complicación para el gobierno. También es difícil para la oposición. “Si el año pasado de 300 proyectos presentados se aprobaron sólo 4, entre ellos la 125, si no hay acuerdos este año la comisión directamente no va a funcionar” explicó a La Política Online Cristian Gribaudo, un ascendente diputado macrista que oficia de vicepresidente en esta comisión.

La situación plantea que, si o sí, para que un proyecto salgo de esa mesa con un dictamen de mayoría deberá fluir una palabra que hasta ahora no se conocía en el Congreso. Esa palabra, es “consenso”.

Acuerdos parlamentarios

“Están teniendo problemas, lo reconoce el presidente de la Comisión”, cuenta Gribaudo, quien se reunió con Cantero, un cordobés ultra K que defendió hasta las últimas consecuencias la 125, para avanzar en puntos comunes.

“Le pedí que lo consulte con el gobierno para que después no nos volteen los acuerdos desde arriba, porque a veces pobre Cantero él hace los esfuerzos para desde la Rosada se los bajan”, explicó el diputado macrista que tendrá un rol importante en el Congreso este año porque buscan foguearlo para que ocupe una plaza de mayor protagonismo en el armado bonaerense de PRO.

Saben que para poder lograr algún tipo de acuerdo no pueden tomar un amplio abanico temático, sino que deben concentrarse en puntos importantes donde puede haber conexión. Por eso, como prioridad buscarán avanzar en soluciones para el sector lechero y ganadero, lejos de la complejidad que sugiere, por ejemplo, las retenciones a la exportación de granos.

Hay infinidad de proyectos presentados en esa comisión que trabó el gobierno en su cruzada contra el campo. “Voy a mandar uno que tenemos para que no se termine la cría de vacunos” contó Gribaudo, quien sugirió que en este marco “vamos a estar importando carne en dos años”.

Sobre las retenciones, explicó que “retenciones siempre está en agenda, pero podemos posponer retenciones y dirimir prioridades”. Entre los temas más escabrosos, está uno para limitar las atribuciones de la Oncca y reordenar la conformación de su directorio. Sobre esto, según una fuente legislativa, hay en Agricultura “proyectos presentados que van desde la eliminación a la democratización del directorio”.