35 bancas en la Cámara de Diputados pondrá en juego la provincia de Buenos Aires y la alianza del peronismo opositor sólo tiene confirmado dos lugares, el de Felipe Solá y el de Francisco De Narváez, para pelear por ellos. Pero mientras estos definen cual de los dos encabezará la boleta, un puñado de peronistas intenta sumarse a la movida que arrancó la semana pasada con el impulso de Mauricio Macri para intentar acomodarse en la lista del justicialismo anti K.

“Detrás de los compañeros de la cabeza del armado hay un importante grupo de aliados justicialistas, de distinta envergadura que estamos llenando este espacio” dijo a La Política Online Marina Casesse, otrora referente de la campaña presidencial de Roberto Lavagna y hoy una de las que suena para ocupar un lugar debajo de los diputados.

“A partir de esta reunión, todo se ha movilizado y han salido de las cuevas los que están con Kirchner y los que no” apuntó más escueto Fernando “Pato” Galmarini, otro nombre en danza quien, a este medio, minimizó esa posibilidad pero evitó desmentir.

Lo cierto, es que la revolución mediática provocada por el cónclave entre Macri, Solá y De Narváez abrió el interés de muchos que, aunque ya venían “caminando la provincia” –como les gusta decir a los peronistas-, ahora han visto en esta unión un espacio ideal para acercarse a una esperanza de poder sin tener que arrodillarse al kirchnerismo.

Nombres propios

“Debe haber muchísimos pensando en esto –siguió Galmarini-. El peronismo, siempre ha metido entre 20 y 22 diputados. Si se volviera a cumplir, esta podría ser una lista muy larga”.

Por esto, es que fuentes consultadas en off the record agregan a estos candidatos otros nombres: Jorge Sarghini –con experiencia como ministro en la provincia y a quien se le acaba su período como diputado este año-; Carlos “Tato” Brown –cercano a Felipe Solá, hombre de Eduardo Duhalde y presidente del Movimiento Productivo Argentina (MPA)-; y Gustavo Ferri –ex diputado y yerno del ex presidente-, son los primeros mencionados.

A estos habría que sumarles, lógicamente, los que imponga el jefe de Gobierno porteño. Ahí, el candidato puesto es su primo y diputado provincial, Jorge Macri.

Este medio se comunicó con Brown quien, siguiendo la línea, se desprendió de su posibilidad como diputado y dijo que hoy su responsabilidad es “la coordinación” como integrante de “la mesa de análisis”. Espacio que también integran el ex embajador Eduardo Amadeo, el ex ministro de Asuntos Agrarios y asesor de Solá, Raúl Rivara, y hasta el titular del sindicato del personal rural (UATRE), Jerónimo “Momo” Venegas.

La mano de Chiche

Aunque no será candidata ya que tiene su banca en el Senado hasta 2011, las fuentes consultadas registran a Hilda “Chiche” Duhalde como la punta de lanza de este espacio en la provincia a la hora del “armado”. Lo que arroja esta primera lectura es que, aunque Macri insista en despegarse de la imagen del duhaldismo, los genes políticos de Solá y De Narváez sumado a los nombres que surgen cuando se piensa en completar esos espacios guardan la impronta del ex mandatario.

“En la 3º sección todo lo que se arma es duhaldismo autóctono, el de Lomas, el de (Osvaldo) Mércuri. El otro día preguntaban: `¿Qué hace Felipe Solá al lado de Mércuri?´. Lo que hace, es sostener 30 mil urnas”, aseguró a La Política Online un operador de este espacio.

Lo que el vocero intenta aclarar es lo mismo que da razón a que, en su primera conferencia de prensa conjunta, Solá y De Narváez hayan anunciado que impulsarán la boleta única: el temor a la manipulación de boletas.

Según especulan, en 2007 De Narváez y Sarghini –en la lucha por la gobernación- lograron buenos números sin tener boletas en al menos 50 distritos. “En muchos por que no llegaron y en otros porque las sacaron”, aclaran. Por esto es que quieren que el apellido Duhalde que lleva Chiche sea quien lidere el armado. Una especie de muestra de poder.

Así destacaban que, en los últimos días, la senadora y ex primera dama se metió en el MPA, va hoy a Lomas, el jueves a Hurlingham y ya estuvo en José C. Paz, tierra del ultra K Mario Ishii. Mucho movimiento para alguien que, aparentemente, no está campaña.