El poder desnudo
El kirchnerismo ingreso en la fase brutal de su existencia política. La censura de Nelson Castro y la masiva compra de medios y empresas, son el emergente de un poder a la defensiva, al que se le agotan los argumentos. La capacidad de daño como último refugio. Pero no esta muerto quien pelea, y la oposición se distrae frente a una fiera acorralada.
“La política es la dura y lenta penetración en un material resistente, y para esto se necesita a la vez pasión y mesura”

Max Weber


El vínculo íntimo que existe entre política y violencia hace ya demasiado tiempo es un dato fuera de discusión. Quien no quiera ver esta realidad difícilmente entienda las razones del poder. Pero como todo en la vida, hay grados, matices y procesos. En su decadencia, el kirchnerismo ha ingresado en la fase brutal de su existencia política. Perdida la posibilidad de la seducción, sólo le queda el poder desnudo.
El poder desnudo

La censura de Nelson Castro refleja esa carencia que afecta a los Kirchner. Ya no quedan argumentos, ni siquiera convicciones, sólo miedo y fuerza ¿Qué tan terrible es lo que podía afirmar este periodista ante los micrófonos? ¿Tan frágil es el poder actual que no resiste las palabras de un hombre, que hizo de la moderación un estilo de vida?

Revela además el episodio, el dispositivo lineal de acumulación de poder que construyó Néstor Kirchner. Una empresa favorecida con obras públicas, financiada a fuerza de millonarios sobreprecios y discrecionales adjudicaciones, que desborda su tamaño y objeto social para ingresar en la prensa, esa verdadera bestia negra de todos los regímenes que se sueñan hegemónicos.

La vanidad del propio poder es acaso la madre de los mayores errores en política. Cuando el gobernante se embriaga con su influencia, suele vaciar de contenido la acción que impulsa, y entonces, la decadencia ya es demasiado avanzada como para evitarla.

Pero aún en esa fase terminal, sigue tratándose de un juego duro derrotar a un hombre de recursos, astuto, dispuesto a todo para conservar su posición.

Kirchner en la trinchera


En la oposición circula una peligrosa combinación de insensata confianza en el propio triunfo y cierta disputa de egos, que dificulta –por ejemplo- el armado de un frente unificado. Frente a esta realidad, Néstor Kirchner trabaja a sol y sombra para revertir una derrota que de ninguna manera será sencilla ni inevitable.

En su peor hora, exhibe una garra que debería encender luces de alarma en aquellos que lo enfrentan. Es este Kirchner del ocaso el que no duda en tragar todos los sapos que hagan falta, si acaso le otorgan una mínima luz a la posibilidad de retener el poder –o al menos amortiguar la caída-.

Carlos Reutemann, Mario das Neves, José Luis Gioja, Daniel Scioli, Juan Schiaretti han protagonizado, cada uno con su estilo, distintas insubordinaciones a la Quinta de Olivos. Y lejos de los castigos y las furias de antaño, Kirchner traga saliva y sólo les pide que compitan con los colores del PJ. Ya casi ni reclama lugares en las listas, ni presencia en los actos y hasta acepta que hablen a favor del campo.

¿Cómo es posible semejante cambio en el inflexible patagónico? Muy simple, fue el primero en darse cuenta que perdió, por lo menos, la mitad de su poder, y trata de acomodarse a la nueva situación.  Un pragmatismo que no impera en la oposición, en la que, por ejemplo, se observan peleas entre Francisco de Narváez, Felipe Solá y Jorge Macri o entre Elisa Carrió y Mauricio Macri. Disputas acaso más vinculadas a cuestiones de ego que a la construcción de una alternativa de poder.

El Estado soy yo
 
Es esta trinchera en la que cava icansable, cada día que pasa Kirchner afianza el control directo de los resortes más importantes del Estado.

Un verdadero gabinete paralelo se oculta detrás de la formalidad de ministros sin poder. Un elenco que integran hombres como Ricardo Echegaray, Guillermo Moreno, Ricardo Jaime, Amado Bodou y tantos otros que reportan directamente a Olivos, decide la política económica, la distribución de miles de millones, los castigos y los premios, junto a un par de elegidos por su obediencia ciega, como Julio de Vido y Carlos Fernández. Esquema de control y disciplina que acaba de sumar a su vocero, Alfredo Scocimarro, en el estratégico manejo de la pauta oficial.

La política es simple pero tiene su eficacia: conservar el manejo directo del dinero, de los beneficios y castigos que dispone el Estado, a través de funcionarios que no respetan jerarquías –salvo la última y única-, ni le temen a las consecuencias legales de aquello que se les pide, ni al cuestionamiento público, y sobre todo, que casi no hablan. Subordinación y valor. Con eso alcanza.

El Conurbano o la vida

Una encuesta de Julio Aurelio que circula por despachos oficiales, alimenta las esperanzas kirchneristas, que hoy se concentran en la provincia de Buenos Aires. En este trabajo –que mide imagen, no intención de voto-, Daniel Scioli aparece muy arriba, en torno al 50 por ciento, seguido por Néstor Kirchner con un 32 por ciento, mas atrás Cristina y recién después la oposición.

Por eso Kirchner quiere a José Scioli en la lista de diputados. Sabe lo que tracciona  el apellido. Pero al secretario General de la Gobernación no lo seduce la propuesta, que en todo caso comenzará a definirse alrededor de mayo, al igual que las hipotéticas candidaturas de Sergio Massa y Graciela Ocaña.

Las postulaciones del jefe de Gabinete y la ministra de Salud, lejos de representar un premio son salidas elegantes, para dos funcionarios que no lograron ajustarse al modelo de “conducción” de Néstor Kirchner. “No quiere darle la oportunidad a Ocaña de irse denunciando corrupción, por eso trata de mantenerla entre algodones hasta las elecciones, y que después se vaya a un monobloque y se diluya de a poco”, afirmaron a este columnista fuentes del kirchnerismo.

Es sabido que en la provincia de Buenos Aires –y sobre todo en el Conurbano- se define la elección nacional. Por eso, Kirchner recibe semanalmente a algún intendente de los que pesan, con quien repasa junto al secretario de Obras Públicas José López, las obras a implementar en su distrito.

“Nos pide que lancemos las obras ya, porque el sabe lo que tardan en ponerse en marcha y las quiere a full antes de las elecciones”, explicó a La Política Online un intendente del sur del Conurbano. “Yo peleo contra la burocracia nacional, vos encargate de la de tu municipio y dispará las obras cuanto antes, fue lo primero que me dijo cuando nos vimos”, agregó el intendente.

¿Pero estará la plata? En el Ministerio de Planificación ya hicieron las cuentas. “Se va a pagar aproximadamente un 30 por ciento del total de las obras antes de octubre”, se sinceraron ante La Política Online en esa cartera.

“Van a hacer lo mismo de siempre, pagarán los primeros dos o tres certificados de obra y después nos van a decir: aguanta un poco, seguí con la obra, que después de las elecciones liberamos los pagos. Y así nos tienen agarrados y se financian con las empresas”, agregó un resignado empresario del sector.

Las obras serán las más rápidas y visibles: cloacas, asfalto, luminarias, plazas, agua corriente. “Seguro que suman votos, pero habrá que ver como se conjugan con la crisis económica, que ya se siente. Tal vez terminen redundando en beneficio del intendente local y no empujen todo lo que pretende Kirchner la boleta de diputados nacionales”, agregó el intendente consultado.

Igual, Kirchner no descansa y trabaja sobre otro objetivo: dividir lo más posible la oferta electoral opositora, para que el PJ sea primera minoría. Cerca suyo asumen sin rubores que las candidaturas del intendente de Morón José Sabatella; y del ex gobernador Carlos Ruckauf; apuntan a sacarle votos por izquierda a la Coalición Cívica y por derecha a Felipe Solá y Francisco de Narváez.

¿La oposición dará la talla?

“Están cometiendo un error muy grave, nadie está muerto hasta que entró al cajón y lo taparon de tierra”, afirmó a La Política Online un experimentado operador político en referencia a la oposición.

Hasta Elisa Carrió sorprendió entregando el enorme flanco de no presentar su candidatura. Notable generosidad política, frente a un oficialismo que peleará cada voto con buenas y malas prácticas.

Felipe Solá se lamenta por estas horas de su apresurada crítica a la candidatura presidencial de Carlos Reutemann: “Kirchner escuchó mis declaraciones y ahí nomas dijo: agarremoslo al Lole, que sea nuestro”. Igual, como Kirchner no puede con su genio también empujó la candidatura de Agustín Rossi y ahora Reutemann está enojado con todos. Pero la anécdota sirve para graficar los reflejos hiper excitados, con los que el ex presidente encara octubre.

Como sea, es bastante obvio que el cambio del ciclo económico, la crisis global y local, el conflicto con el campo y el agotamiento de un modelo político, ubican a los actuales ocupantes de la Quinta de Olivos en la senda del adiós. Pero no suele ser una vía segura relajarse y confiar en el destino, cuando se pelea por el poder. Una faena en la que a veces cuentan más los errores ajenos que las virtudes propias.
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  • 11
    Santiago Casado
    02/02/09
    17:24
    Muy buen análisis del peronismo de Kirchner. Pero la nota sugiere que la oposición al peronismo debe ser simplemente una coalición no-peronista, ya que el peronismo mutante no le deja otra alternativa. De modo que el sistema político argentino tendría 2 partidos: el peronista y el no- peronista, ambos un rejuntado de derecha, centro e izquierda. ¿Por qué el electorado habría de votar por la copia, teniendo el original en el peronismo? La posibilidad de una alianza de Carrió con Macri o Lopez Murphy es un nuevo error de esta mujer. Carrió debiera cerrar la boca un poco más, posicionarse en la centro izquierda junto al socialismo y parte del radicalismo, tratar de seducir a parte del peronismo asqueado y construir desde ahí, bajo la figura de Binner, que es el más fuerte emergente de ese sector. La oposición al peronismo no debe ser un rejunte de cualquier cosa. Que Macri juegue solo como opción de centro-derecha. Hoy día la mayor aliada del peronismo de Kirchner es paradójicamente Elisa Carrió, que rompe y fragmenta la oposición de centro izquierda que emerge en el país.
    Responder
  • 10
    El Viejo Vizcacha
    02/02/09
    13:04
    Definitivamente, después del fraude electoral del 2007 y de todas las concesiones hechas por el pueblo a este matrimonio presidencial, los argentinos hemos perdido la democracia. Dios nos ayude.
    Responder
  • 9
    Marcela Lima
    02/02/09
    12:37
    Espero que los argentinos les demos un escarmiento a estos sinvergüenzas en las urnas. No puede ser que nos aguantemos tantas trompadas sin devolverles por lo menos un sopapo. Si les interesa, entre en http://libresdelsuralmirantebrown.blogspot.com/ y dejen su voto en la encuesta para diputados de la provincia de Bs. Aires.
    Responder
  • 8
    Juansintierra
    02/02/09
    11:50
    Por favor un médico especialista en temas de drogadicción para Pilar.... es urgente.....está por entrar en coma por sobredosis....juaz
    Responder
  • 7
    Alejandro
    02/02/09
    11:09
    OSOPARDOCHICO vos debes ser un golpista como los que atentaron contra la democracia, seguro a favor del campo, de la oligarquia y de los pseudoaristocratas que se creen que manejan el pais. Igual en este espacio hay que opinar del articulo y respecto a eso digo lo siguiente: por que seguimos mezclando las acciones del gobierno con la politica? Muchacho: hagan politica sin mezclar la gestion y de esa manera saldremos adelante...
    Responder
  • 6
    andrem
    02/02/09
    09:51
    Pilar:
    ¿Te fumaste un porrito para escribir el comentario?. ¡Dale, decì la verdad!
    Responder
  • 5
    Flavius
    01/02/09
    21:50
    Muy buen análisis, y excelente la foto (muy ilustrativa).
    Responder
  • 4
    osopardochico
    01/02/09
    21:39
    No escriban mas, no llegamos, no habra elecciones.
    Responder
  • 3
    esteban
    01/02/09
    20:52
    EXCELENTE ANALISIS POLITICO , muy CLARO.
    Responder
  • 2
    andrem
    01/02/09
    20:03
    A pesar de todo tu poder, te venceremos NK.
    El pueblo unido jamàs serà vencido.
    Responder
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